donostia - Se ha encendido la alarma roja en la medular txuri-urdin. A las bajas seguras de Granero y Zurutuza hay que sumar la posible sanción de Markel por acumulación de amonestaciones y la lesión de Illarra. Como informamos ayer, el club ha presentado alegaciones al acta por la amarilla del elgoibartarra, ya que las imágenes demuestran que se resbala y que en ningún caso tiene intención de derribar al jugador vallecano.
Con Illarra ayer llegaron noticias esperanzadoras, ya que solo sufre un “esguince de grado I del tobillo derecho”, por lo que tiene muchas opciones de poder llegar a tiempo para enfrentarse al Valencia. El propio Rubén Pardo, que por ahora es el único centrocampista nato que tiene Eusebio para afrontar el choque ante los levantinos, reconoció que alguno de sus compañeros se recuperará para el encuentro.
La nota más llamativa de la sesión celebrada ayer en Zubieta bajo una incesante y fina lluvia fue la presencia de un desconocido futbolista chino, del que el club no había facilitado información hasta la fecha. Al parecer, y tal y como comunicó posteriormente el departamento de comunicación txuri-urdin, se trataba de Sun Gouwen. Su presencia se encuadra dentro del acuerdo estratégico de patrocinio con Qbao.
Por Zubieta han pasado varios chinos además de él, dentro de un programa de perfeccionamiento técnico con jugadores del país asiático. La Real quiso aclarar que, pese a cumplir el sueño de miles de guipuzcoanos al poder trabajar junto al primer equipo, no se encuentra a prueba con el Sanse ni con el Berio. Es más, en este último equipo militan otros dos jugadores que llevan semanas trabajando aunque no tengan opciones de fichar y quedarse en la disciplina txuri-urdin. - M.R.