El Chelsea, un ‘aburrido’ campeón

bilbao - El Chelsea se metió más de media liga en el bolsillo tras el empate a cero cosechado el pasado domingo en el Emirates Stadium y con sendas victorias ante el Leicester el miércoles, y ayer frente al Crystal Palace, se proclamó campeón de la Premier League. Su quinta liga, la tercera de Jose Mourinho como técnico blue. Restan tres jornadas para la conclusión del campeonato y nadie puede alcanzar a los londinenses en la tabla. Con 83 puntos en su haber y otros nueve por disputar, el Chelsea ha demostrado ser el más regular: 69 goles a favor, 27 en contra; y un bagaje de 25 victorias, 8 empates y 2 derrotas. Ambas a domicilio: Newcastle (2-1) y Tottenham (5-3). Stamford Bridge se ha convertido en el mejor de los fortines, con un único pero, enorme, eso sí. Fue en la FA Cup, en los dieciseisavos de final. Un borrón. Una derrota sin paliativos por 2-4 ante el Bradford, de la Cuarta División del fútbol inglés. Una mancha dentro de un extraordinario currículo. Dos títulos: Liga y Copa de la Liga.

Pero como no podía ser de otra manera, la polémica ha perseguido una vez más al conjunto londinense. El pasado domingo, en el choque ante el Arsenal, los hinchas gunners entonaron una canción, al grito de “¡Boring, boring!” (¡Aburrido, aburrido!), que no le sentó demasiado bien a Mourinho. “Aburrido es estar diez años sin un título. Es muy aburrido cuando eres aficionado de un club y esperas, esperas tantos años”, ironizó el técnico portugués en rueda de prensa.

Curiosidades de un mundo tan cambiante como el fútbol, los aficionados del Arsenal, equipo que durante muchos años fue tildado de aburrido por la prensa inglesa, criticaron la rácana imagen ofrecida por el Chelsea, que bien es cierto no viene cuajando buenas actuaciones en las últimas semanas. Cesc Fàbregas ha perdido el protagonismo que tuvo al inicio de la temporada y los problemas físicos de Diego Costa han mermado notablemente la capacidad ofensiva de un equipo que ha disputado las últimas jornadas con el veterano Drogba como titular.

El técnico luso, en el segundo año de su segunda etapa al frente del Chelsea, ha cimentado su éxito en la Premier League aferrándose a las buenas prestaciones de Courtois, Cahill, Terry, Ivanovic, Azpilucueta, Matic, Cesc, Oscar, Costa, William y Hazard. Su once de gala, con el habilidoso extremo belga, galardonado como mejor jugador de la liga, como principal referente.

Un título basado en el rigor defensivo y la regularidad ante el resto de grandes. 13 puntos de 21 posibles; cero derrotas y aún un partido ante el Liverpool a la vista. Un digno vencedor que recupera su cetro cinco años después y acaba con la hegemonía de los dos clubes de Manchester, que se habían repartido las últimas cuatro ligas.