bilbao - A pesar de la rotunda y humillante derrota que recibió el Real Madrid el pasado sábado, en el derbi con el Atlético, su máxima estrella, Cristiano Ronaldo, no consideró oportuno suspender o aplazar la fiesta que tenía organizada para la tarde-noche del mismo sábado para festejar sus 30 años, cumplidos el pasado jueves.

A la misma acudieron compañeros como Keylor Navas, Pepe, Marcelo, Coentrao, Khedira, James o Luka Modric, todos ellos extranjeros. No hubo ningún futbolista estatal, aunque alguno estaba invitado, como Iker Casillas o Sergio Ramos.

También acudió el segundo técnico, Fernando Hierro, a la fiesta de celebración preparada por Cristiano Ronaldo en un restaurante cercano a su casa en La Finca, situada en una de las más selectas zonas residenciales de Madrid.

En In Zalacain se dieron cita cerca de 150 invitados entre los que estuvieron compañeros como Keylor Navas, Marcelo, Fabio Coentrao, Khedira que no pudo acabar el derbi por una lesión muscular y los lesionados Pepe, James Rodríguez y Luka Modric.

La fiesta la amenizó la música del cantante colombiano Kevin Roldán, que subió a sus redes sociales imágenes de la celebración con los jugadores, incluso circula un vídeo cantando en el escenario junto a Cristiano Ronaldo.

El técnico madridista había dado dos días libres a la plantilla y varios de sus integrantes no fallaron a la celebración de Cristiano Ronaldo.

Tampoco fue Carlo Ancelotti, afectado tras la derrota más dura desde que dirige al Real Madrid, pero sí estuvieron presentes sus segundos técnicos, Hierro y Paul Clement, junto al delegado Miguel Porlán Chendo.

Terminado el partido con la dura derrota, Cristiano Ronaldo afirmó que era un día “para olvidar lo más pronto posible”, y reconoció que faltaron en su equipo “ganas, actitud” y “frescura física y mental”.

“Jugamos muy mal, en todos los sectores, de abajo a arriba. Es un día para olvidar lo más pronto posible porque el Real Madrid no puede perder con ningún equipo del mundo por 4-0”, aseguró Ronaldo.

Carlo Ancelotti, que no tuvo cuerpo para acudir a la fiesta, aseguró que su equipo hizo “el peor partido” desde que es entrenador madridista, reconoció que ninguno de sus jugadores hizo un buen encuentro y les pidió “un cambio de actitud” para enderezar el desastre.

Lo cierto es que el Atlético de Madrid se ha convertido en el nuevo capo de la ciudad para jolgorio de sus seguidores, de habitual resignados a vivir a la sombra del gigante blanco.

El Atlético, además, pegó un golpe a la liga, que se aprieta en la cabeza tras su holgado triunfo y prolonga la racha exitosa ante el vecino, que se alarga a seis encuentros.

la racha Desde la derrota en Lisboa en la final de la Champions el 24 de mayo de 2014, los indios han sometido a los vikingos en todos sus enfrentamientos. Empataron en el Bernabéu en la Supercopa de España (1-1), ganaron en la vuelta en el Calderón (1-0), triunfaron en la primera vuelta de la liga en el Santiago Bernabéu (1-2), volvieron a hacerlo en el Calderón en los octavos de final de la Copa (2-0), igualaron en la devolución de visita (2-2) y han vuelto a derribar al contrario en la competición de la regularidad en el Manzanares (4-0).

Simeone le ha tomado la medida a Carlo Ancelotti. La victoria cerró para el Atlético, que no se imponía al Madrid en liga en casa desde 1999, la única racha negativa ante los blancos que aún permanecía. Y además, estableció una nueva marca: la de enganchar tres victorias en el Calderón en tres derbis de forma consecutiva.