Osasuna y el capote de San Fermín

Bilbao - Ocho equipos corren el peligro de acompañar al Betis rumbo a Segunda División, y el que más papeletas tiene es Osasuna. Ocupa la penúltima posición de la tabla, con 35 puntos, y es el único que no depende de sí mismo para salvar la categoría. Necesita ganar los dos partidos que restan, aunque le podía valer con sumar cuatro puntos, y que no lo consigan Getafe, Almería y Valladolid. También puede ser decisivo la diferencia de goles particular o el golaverage general. Por si acaso, la afición rojilla ya implora un milagro. El capotazo de San Fermín.

Osasuna ha igualado el récord de temporadas consecutivas en Primera División (de 2000-01 a 2013-14 y de 1980-81 a 1993-94) pero corre serio peligro de quedarse en esta marca a causa de su desfondamiento en la recta final del campeonato, justo la fase en la que tradicionalmente reactiva su espíritu de supervivencia, el mismo que le ha servido por ejemplo para salvarse en la temporada 2008-09 ganando 0-1 en la penúltima jornada en el Camp Nou (eso sí, con el Barça ya campeón y con muchos suplentes) y al Real Madrid (2-1) en la última. Casi nada.

Entonces, la escasa motivación de los dos gigantes , con todos sus objetivos cumplidos, ayudó al equipo dirigido por José Antonio Camacho. Mañana Osasuna se enfrenta al Espanyol en su estadio de Cornellà- El Prat y despide la Liga en El Sadar contra el desahuciado Betis.

El equipo de Javier Aguirre, exjugador de Osasuna y el entrenador con el que en 2006 los navarros se clasificaron por primera y única vez para la previa de Champions al quedar cuartos en la Liga, solo ha sumado un punto de los 18 últimos disputados, experimentando un derrumbe considerable. Sin embargo, con 41 puntos en su casillero, el Espanyol no está salvado. Se han encendido las alarmas y, en consecuencia, el vasco Aguirre, por mucho que le duela, está obligado a hundir en la miseria al conjunto pamplonés.

regalo de 600 entradas Osasuna regaló ayer 600 entradas para sentir el arrope de su gente en el estadio perico. Los hinchas aguardaron hasta diez horas junto a las taquillas y se calcula que unos mil seguidores rojillos apoyarán al equipo en este transcendental partido.

"Estamos animados y mentalizados para jugar una final", advirtió ayer Patxi Puñal, el alma del equipo, que a sus 38 años se resiste a colgar las botas y representa la fe.