madrid - El juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz imputó ayer al Barcelona, como persona jurídica, por un delito fiscal en el fichaje del delantero brasileño Neymar, después de que la Fiscalía así lo pidiera al considerar que el club defraudó 9,1 millones de euros a la Hacienda Pública.
Ruz, que ya investiga al expresidente del club Sandro Rosell por apropiación indebida en ese fichaje, ha tomado esta decisión después de que el miércoles el fiscal José Perals se lo reclamara en un escrito en el que afirmaba que uno de los indicios de delito fiscal "es la existencia de contratos simulados, así como la realización de operaciones de ingeniería financiera, mediante los que se pretende cometer el engaño a la Hacienda Pública".
"Concurren al presente estadio indicios suficientes para la investigación acerca de la posible comisión del delito contra la Hacienda Pública por parte de la entidad Fútbol Club Barcelona", afirma ahora el juez en un auto, en el que también acuerda una serie de diligencias, que ya le había reclamado el fiscal para confirmar la comisión del delito fiscal por parte del club.
comisión rogatoria a suiza Entre ellas está cursar una comisión rogatoria a Suiza pidiendo que la FIFA, con sede en ese país, le entregue la documentación que tenga sobre el fichaje de Neymar tras la negativa de la FIFA a entregarle directamente los documentos, al entender el organismo internacional que se debía hacer vía comisión rogatoria por tratarse de información privada.
El magistrado entiende que las cantidades abonadas por el Barcelona por el fichaje del jugador brasileño "podrían responder, en cuanto a su verdadera naturaleza, a una mayor retribución del propio jugador, teniendo en tal caso la consideración de rendimientos de trabajo, y debiendo tributar por este concepto".
El contrato de Neymar se firmó en Barcelona el 3 de junio de 2013 entre el jugador y su padre, de un lado, y Rosell y el presidente actual del club, Josep Maria Bartomeu, de otro, pero no entró en vigor hasta el 29 de julio de 2013, con una duración de 5 años. De acuerdo con estos periodos, Neymar tenía en ese tiempo la condición fiscal de "no residente", por lo que "la obligación de tributar correspondería al pagador, el FC Barcelona". - Efe