AMOREBIETA: Altamira, Garmendia, Carro, Blanco, Larreategi, Sánchez (Min. 59, Salinas), Bordas, Apraiz (Min. 63, Arman), Ibai (Min. 51, Pan), Casares y Orbegozo.

SESTAO RIVER: Etxebarrieta, Resines, Alberto (Min. 65, Tato), Esnaola, Arkarazo, Cabero, Diamanka, Hernáez, Álex, Carrera (Min. 67, Urkizu) y Jito (Min. 77, Aketxe).

Goles: 0-1: Min. 2; Jito. 1-1: Min. 45; Apraiz. 1-2: Min. 49; Hernáez. 1-3: Min. 61; Álex. 2-3: Min. 87; Pan. 2-4: Min. 90; Urkizu.

Árbitro: Vicente Moral. Amonestó a los locales Bordas, Blanco, Larreategi y Carro; y al visitante Resines.

Incidencias: Unos 1.200 espectadores en Urritxe.

amorebieta. El Sestao River puso fin a su sequía como visitante al lograr sus primeros puntos de la temporada lejos de Las Llanas. Y lo hizo venciendo al Amorebieta en Urritxe en un derbi no exento de polémica arbitral, ya que los azules vieron cómo les anulaban dos goles en la primera mitad y protestaron que los dos últimos tantos visitantes no debieron subir al marcador.

Cuando el público todavía se estaba acomodando, los verdinegros se adelantaron por medio de Jito. El experimentado delantero, llegado este verano del ascendido Eibar, aprovechó un centro de Álex desde la izquierda para cabecear el balón a la red, batiendo a su excompañero Altamira. Ya no hubo ni un segundo de respiro, ya que los de Leniz se obsesionaron por empatar lo antes posible. Larreategi y Bordas vieron puerta, pero el linier marcó fuera de juego en ambas acciones. El propio Bordas tuvo otra gran ocasión para igualar la contienda, pero su disparo se marchó por encima del travesaño. Los intentos de Casares también fueron baldíos y cuando ya parecía que los de Viadero se marchaban al descanso por delante, entró en escena uno de los tres jugadores que cambiaron Las Llanas por Urritxe el pasado verano. Apraiz, que en Amorebieta está contando más como interior que como lateral, tuvo tiempo para sacarse un disparo duro y raso desde fuera del área y colar el balón pegado al palo.

Visto el panorama parecía que los azules habían logrado lo más difícil, pero al arrancar el segundo acto recibieron un nuevo mazazo. Hernáez provocó una falta al borde del área y él mismo le sacó provecho. Su disparo fue al lado en el que debía estar Altamira. Escasos minutos después, los locales pidieron penalti en una mano de Resines que el colegiado entendió como involuntaria. Las quejas contra el árbitro aumentaron en el 61, cuando los de Ezkerraldea lograron el tercero. Jito desarboló la defensa con un pase en profundidad a Carrera, que partió en posición más que dudosa. El linier dejó seguir y Carrera se la cedió a Álex, que no perdonó.

El Amore intentó recortar la diferencia con más ímpetu que juego y lo logró a tres minutos del 90 cuando, tras un centro de Garmendia, Pan tocó lo justo para que la bola rebasara la línea después de dar en el palo. Con los azules volcados, Urkizu puso la sentencia en otra jugada polémica. Y es que Urritxe protestó que en el inicio del contragolpe el árbitro debió parar el juego y amonestar a Álex, que cortó un saque de falta de Arman sin estar a la distancia correcta.