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Young&Hamilton, sociedad juvenil

El medio inglés coincidió en el equipo de fútbol del colegio con el piloto de F-1

Young&Hamilton, sociedad juvenilFoto: AFP

Bilbao

En la promoción de 2001 de la John Henry Newman School, una escuela secundaria católica ubicada en Stevenage (Inglaterra), se produjo un hecho asombroso: dos futuras estrellas del deporte mundial coincidieron en el equipo de fútbol de una institución que no llega a los 1.500 alumnos. Uno tenía muy claro que de mayor iba a ser futbolista, no le interesaba absolutamente nada más y así se lo hacía saber a compañeros, técnicos y profesores; el otro, dotado extraordinariamente para el deporte y habitual también en las competiciones de atletismo y los partidos de cricket, se lo tomaba más como entretenimiento pues ya le había picado el veneno de la velocidad. Uno, seis meses más joven, era el habilidoso del equipo, el regateador, el que metía goles amparado en su supersónica velocidad; el otro, más hecho físicamente, se ubicaba en la medular y su principal misión era meter la pierna ante los avances del rival, labores de intendencia. Dicen que nunca se tuvieron excesiva simpatía, que no había conexión entre ellos fuera de los terrenos de juego, quizá porque aquel ecosistema era demasiado pequeño para dos críos que tenían grabado a fuego su deseo de ser dos ases del deporte. El primero es ahora futbolista del Manchester United y de la selección inglesa y responde al nombre de Ashley Young; el segundo tuvo en 2007 un debut fulgurante en la Fórmula 1, se proclamó campeón el siguiente curso y se llama Lewis Hamilton.

Young y Hamilton lograron cumplir con creces sus sueños de niñez, los deseos que perseguían cuando no eran más que dos colegiales. A la hora de recordar los viejos tiempos, el piloto siempre se ha explayado más que el futbolista, que en alguna ocasión ha puesto como condición para ser entrevistado que no se le cuestionase sobre su excompañero en la John Henry Newman School. Y cuando ha hablado del tema, ha sido bastante escueto. "Lewis no era mal futbolista. Era un centrocampista que trabajaba muy duro. Él solía pensar que era mejor futbolista que yo pero no sé de donde sacó esa idea. La verdad es que en el colegio teníamos un buen equipo. Nunca ganamos ningún torneo, pero siempre éramos uno de los conjuntos a batir en nuestro área", ha recordado alguna vez.

Por su parte, el piloto de McLaren nunca ha escondido que de no haber triunfado en el mundo de los monoplazas habría intentado ser futbolista profesional. "En aquella época yo tenía más ritmo de juego que Ashley, posiblemente porque era algo mayor, pero él era más talentoso. Yo era muy competitivo, siempre lo he sido. Era un centrocampista que metía la pierna tan fuerte que a veces me arriesgaba a rompérmela. Nunca he vuelto a hablar con él desde que dejamos el colegio, pero tengo amigos que mantienen el contacto con él y nos hemos mandado algún mensaje mediante ellos", afirma.

Tras abandonar la institución de Stevenage, sus carreras no tardaron en dispararse hacia el estrellato. Young recaló en la cantera del Watford y en 2003, a los 18 años, debutó en el primer equipo, demostrando rápidamente sus excelsas cualidades. Ese mismo año, Hamilton dio muestras de su gran potencial proclamándose campeón de la Fórmula Renault 2.0. El interior derecho siguió progresando en las filas de los Hornets y en enero de 2007 fue traspasado al Aston Villa, marcando en su debut. Menos de tres meses después, Lewis debutaba en la Fórmula 1 al volante de un McLaren con un extraordinario podio en el Gran Premio de Australia. Con solo 22 años, ambos habían llegado donde querían.

En noviembre de 2007, Young cumplió otro de sus sueños infantiles al debutar con la selección absoluta inglesa, mientras que un año después su excompañero de colegio tocaba el cielo al proclamarse campeón de la Fórmula 1. Hamilton no ha vuelto a repetir éxito desde entonces, mientras que Ashley sí que ha dado nuevos pasos al frente en su carrera futbolística. Su gran rendimiento en el conjunto de Villa Park le sirvió para ser fichado por el Manchester United el pasado verano y ahora debuta en una gran competición por selecciones. A veces, los sueños infantiles acaban convirtiéndose en realidad.