La obsesión de Del Bosque
El salmantino volvió a recurrir a Cesc como 'nueve' mediado el segundo acto
bilbao
Una obsesión parece perseguir a Vicente del Bosque partido tras partido en la Eurocopa de Polonia y Ucrania. El técnico salmantino parece querer llevar el juego asociativo, el tiki-taka, a su máxima expresión, para lo cual no duda en prescindir de un delantero centro nato como lo es Fernando Torres. La posesión del balón se ha convertido en una obstinación para Del Bosque, que ayer dejó claro, una vez más, que la ausencia de David Villa por lesión ha trastocado sus planes. Para su ideario futbolístico, a no ser que las cosas pinten muy mal para España, algo que todavía no ha sucedido en la presente Euro, parece contar solo con el delantero del Chelsea, relegando a un segundo plano a Álvaro Negredo y aún más retrasado a Fernando Llorente en esa lucha por ocupar el nueve del combinado estatal, donde se ha colado, con mucha fuerza, la figura de Cesc Fàbregas.
De Bosque puso de inicio ante Croacia el mismo once que venció de manera clara a Irlanda. Es decir, con Torres en punta, una clara referencia ofensiva. El delantero estuvo demasiado solo en ataque y se fue con un pobre bagaje de cero ocasiones a su favor. Pese a su falta de acierto, Torres luchó, presionó y se dejó el alma en cada jugada; pero al mismo tiempo pareció dar argumentos al seleccionador estatal para aplicar su idea de jugar sin una clara referencia en ataque.
Ahí es donde entra la figura de Cesc. Si Sergio Busquets es el declarado estandarte futbolístico de Vicente del Bosque, como así lo ha manifestado en alguna ocasión, Fàbregas parece ser su favorito, su obsesión, o por lo menos eso se entiende de sus actos. Torres duró 61 minutos sobre el verde. Fue sustituido por Jesús Navas, que se pegó al costado derecho, lo que hizo que Silva adelantase su posición a la del nueve.
Del Bosque volvió a sus orígenes en la presente Eurocopa apenas diez minutos después, cuando dio entrada a Cesc, a su favorito para ocupar la posición más adelantada del combinado estatal, que jugó en el duelo inaugural ante Italia en esa misma demarcación. Con Croacia volcada en busca de un tanto que le diese la clasificación para los cuartos de final, llegó el tanto de España, marcado por Jesús Navas y que situó a la selección estatal como primera del grupo C. La apuesta de Vicente del Bosque de jugar sin un nueve volvió a ser un acierto. Su obsesión encontró el premio del gol, como lo ha hecho en la Eurocopa siempre que ha jugado sin un punta nato.
Negredo y llorente Relegados en un segundo plano, Negredo y Llorente, a pesar de que el primero debutó ayer ante Croacia en los denominados minutos de la basura, ambos ven cada vez más complicado intervenir en el juego de un equipo que tiene las ideas muy claras. La presión mediática, que azota de manera constante a una selección que lo ha ganado todo, hace aún más complicada la labor de Del Bosque, que pareció escuchar las críticas del duelo ante Italia para dar cabida a Torres contra Irlanda. Sea lo que sea, el delantero del Athletic aguarda, sin rechistar, pero con cara de pocos amigos, la oportunidad de debutar en una Eurocopa, algo que ya conoce el centrocampista Javi Martínez.