OSASUNA PROMESAS: Elías, Eslava, Satrústegui, Navarro, Postigo, Moisés (Min. 69, Raoul), Calderón, Carnicer, Manuel (Min. 85, Mariano), Torres y Castiella (Min. 55, Omar).
BILBAO ATHLETIC: Serantes, Ramalho, Galán, Etxebarria, Albisoa, Morán, Eizmendi (Min. 75, Bustinza), Ruiz de Galarreta, Yurrebaso, Vidal (Min. 58, Eguaras) e Ibai Gómez (Min. 62, Goti).
Goles: 0-1: Min. 11; Ibai Gómez, de falta. 1-1: Min. 57; Torres.
Árbitro: Muñoz Pérez. Expulsó a Albizua (Min. 73), con roja directa. Amonestó a Torres, Navarro, Omar, Etxebarria, Ramalho, Bustinza y Yurrebaso.
Incidencias: Unos 1.000 espectadores en Tajonar.
iruñea. Bien es sabido que la justicia y la suerte no siempre van de la mano. Ayer Osasuna puso la visión, el toque y la iniciativa. El Athletic la casta, el juego directo y el contraataque. Los visitantes golpearon primero y los locales lo hicieron después, haciendo méritos para seguir invictos esta temporada en Tajonar. No obstante, la fortuna corrió de parte del filial rojiblanco.
Osasuna y Athletic se citaron ayer en un partido con morbo. Salieron ambos conjuntos decididos al campo, sin complejos ni ataduras, y ya desde el pitido inicial la rapidez de balón se hizo patente sobre el césped. Tras diez minutos sin dominador claro, una cabalgada de Ruiz desde el centro del campo dio pie a una falta en la frontal del área a favor de los visitantes. Falta que se encargó de materializar Ibai Gómez, superando la barrera y batiendo a Elías, el cual no llegó a atajar la pelota a pesar de su estirada. Un tiro, un gol. Así de eficientes se presentaron los de Ziganda, en un día en el que el extécnico de Osasuna volvía a casa, esta vez como antagonista.
A partir del tanto, el partido tomaría un matiz que no perdería hasta el final del encuentro. Los rojillos se adueñarían del esférico mientras que el conjunto bilbaino esperaba su oportunidad a la contra.
Jugar con el marcador en contra dio nervio a los locales. Iluminados por un gran Roberto Torres, los de casa trenzaron triangulaciones por el centro del campo y aperturas constantes a la banda, aunque el filial osasunista sufrió pérdidas peligrosas del balón en la zona ancha que propició contragolpes del conjunto bilbaino que inquietaron la portería de Elías. Sin embargo, el Bilbao Athletic se encontró en esta última fase más cómodo y Osasuna no consiguió sacar el balón con tanta frescura.
La segunda mitad se presentó con apenas variantes. Ante la capacidad creativa de Osasuna desde la defensa, el Athletic adelantó líneas, impidiendo y complicando la salida de balón, algo que descolocó a los navarros. No obstante, en el minuto 56 Torres pondría las tablas a través de un penalti por mano de Albisoa dentro del área. Tablas que perdurarían en el marcador a pesar de las buenas ocasiones protagonizadas por Calderón. La persistencia no fue correspondida y los de casa se marcharon con la sensación de haber dejado escapar dos puntos.