BILBAO ATHLETIC: Serantes, Bustinza, Etxebarria, Albizua, Saborit, Morán, Goti (min. 81, Medina), Eraso, Ruiz de Galarreta, Ibai (min. 61, Peña) y Orbegozo (min. 72, Guillermo).

LOGROÑÉS: Castilla, Ormazabal, Torres, Rui (min. 64, Albistegi), Iñaki, Nacho, Durán, Manu García, De Paula, Alejandro (min. 60, Dañobeitia) y Cervero.

Gol: 1-0: Min. 25; Orbegozo.

Árbitro: López Toca (cántabro). Amonestó con tarjeta amarilla a los locales Bustinza, Serantes, Morán y Etxebarria y al riojano Manu García.

Incidencias: Unos 900 espectadores en Lezama.

Lezama. Un tanto de Mikel Orbegozo fue suficiente para sentenciar con triunfo el debut del Cuco Ziganda ante su público de Lezama. Y continúan los goles guipuzcoanos que adornan este fulgurante comienzo de Liga rojiblanco en el que los cachorros, tras su segunda victoria, comparten liderato en la tabla de la División de Bronce, al igual que el Amorebieta. ¿Quién lo iba a decir? El doblete de Alain Eizmendi ante el Eibar y el tanto de ayer de Orbegozo asoman a lo más alto el trabajo de los cachorros que además mantienen la portería de Jon Ander Serantes inmaculada. Un inmejorable comienzo antes del derbi de Arlonagusia de la semana que viene.

Infundía respeto la llegada del potente Logroñés, también con tres puntos en la clasificación. Entre ellos, el bilbaino Ormazabal, que cumplió en el lateral derecho, el durangarra De Paula, que remató todo lo que le llegó, y Dañobeitia, que sólo participó la última media hora, retornaban a Lezama, aunque se tuvieron que marchar resignados. Los de Ziganda tejieron su buen fútbol durante media hora, donde mandó Ruiz de Galarreta, y marcaron el gol gracias a un balón que no blocó Castilla y aprovechó por bajo Orbegozo tras acomodarse en el área, y supieron vivir de las rentas. Fue lo mejor de los de casa. También destacó el duelo de los de Santutxu, Ibai frente a Ormazabal, que se dejó ver en ese prometedor comienzo bilbaino que se fue apagando poco a poco. En el debe local: se jugó con fuego hasta el punto de que el empate rondó en demasiadas ocasiones por la puerta local. En el haber: se gestionó con acierto, aunque con riesgo, esa ventaja esperando una nueva oportunidad, que nunca llegó, para sentenciar el partido, cediendo el desgaste al contrario, que acabó viéndose impotente con el dominio del centro del campo pero también con el marcador en cero.

La segunda parte fue un calco del último cuarto de hora de la primera. De Paula lo intentó desde todas las posturas, casi siempre asistido por Durán, pero acusó su falta de puntería y la defensa rojiblanca, por su parte, se mantuvo seria y ordenada.