bilbao. La temporada pasada eran doce los equipos vizcainos que figuraban en Tercera División y este año once, pero siguen siendo mayoría dentro de un grupo -el cuarto- formado por un total de veinte clubes. Y eso que fueron dos los representantes del fútbol vizcaino que lograron el ascenso a Segunda B el curso pasado y uno el que perdió la categoría. La cara de la moneda la protagonizaron Amorebieta y Sestao River, mientras que el Santur-tzi fue el conjunto que acabó diciendo adiós a Tercera tras acabar la temporada en penúltima posición.

Sin embargo, todo eso es pasado y lo que cuenta es el presente. El hoy de una categoría que un año más se presenta complicada, pero a la vez ilusionante, para todos los equipos vizcainos que este fin de semana darán el pistoletazo de salida a la nueva temporada y, por ende, a sus sueños y objetivos. Unos lucharán por entrar en play-off, otros por estar cerca de los puestos nobles de la tabla para tratar de aprovechar toda oportunidad que se tercie, y otros, por mantener la categoría. Así, equipos como el Barakaldo o Portugalete tratarán de hacerse un hueco entre los cuatro primeros clasificados para poder optar al play-off en el que se decidirá qué equipos obtienen el pasaporte para la Segunda B. Una categoría de la que proceden los gualdinegros y a la que tratarán de volver lo antes posible después de acabar la temporada pasada en última posición en el grupo segundo de la categoría de bronce del fútbol estatal.

"Hemos tenido que hacer un equipo prácticamente nuevo para adecuarnos a la nueva categoría", señala Alberto Romero, presidente del club. Y no le falta razón. En total, han sido 18 las incorporaciones realizadas sin contar la del nuevo míster, Iñaki Zurimendi, que ha sido el elegido para guiar la nueva nave baracaldesa. "Su elección se debe a que es un gran conocedor de la categoría", puntualiza Romero, quien afirma ver en buenas condiciones a los suyos de cara al primer envite liguero mañana en Gasteiz.

otros retos En distinta situación, pero con similar objetivo se encuentra el Portugalete. Allí, los aficionados vuelven a soñar un año más con un ascenso que no se produce desde la temporada 2004-05, curso en el que, además, lograron acabar la Liga en primera posición. Sextos la pasada temporada, los jarrilleros arrancarán mañana la Liga contra el Arenas en La Florida. Esa será la fecha y el escenario que supondrá el estreno oficial de Manu Calleja al frente del club portugalujo. "Nos aportará una mezcla de dos características que consideramos muy importantes: juventud y experiencia", afirma Amable Martín, presidente del club, sobre la figura del nuevo técnico. Después de no cumplir con el objetivo marcado la temporada pasada -acabar entre los cuatro primeros-, los jarrilleros han decidido dar también un importante vuelco a su plantilla al incorporar a nada menos que 15 nuevos jugadores para rellenar y completar una plantilla en la que actualmente figuran un total de 20 hombres.

Su primer rival de la temporada, el Arenas, que al igual que otros vizcainos como el Zamudio o la Cultural Durango -equipos que han hecho 13 y 10 fichajes, respectivamente, con el objetivo de mejorar los resultados de la última temporada-, también ha remodelado considerablemente su plantilla de cara al nuevo curso liguero, parte con el claro objetivo de no pasar apuros y tratar de codearse con los nobles de la categoría si se presentara la ocasión. Una zona alta de la tabla para la que otros vizcainos como el Zalla o el Leioa volverán a presentar su candidatura. Los primeros, dirigidos por Ismael Urtubi, intentarán dejar atrás los sinsabores de las últimas temporadas -en las que acabaron en la zona media de la clasificación- para dar nuevas alegrías a su afición, como ya ocurriera hace cinco temporadas cuanto el equipo logró acabar primero. Para ello, el primer test será en casa contra el Laudio, uno de los favoritos para estar arriba en la clasificación final.

El Leioa, con David Movilla como director de orquesta desde el banquillo, ha logrado también armar un bloque que, de primeras, se antoja bastante competitivo para una categoría en la que tratarán de dar un paso al frente después de haber incorporado a un total de once jugadores y de haber acabado en novena posición la temporada pasada. Otro de los once vizcainos, el Santutxu, ha optado por modificar menos su plantilla después de volver el curso pasado a Tercera y acabar en un más que meritorio undécimo puesto.

El Gernika, por su parte, que terminó la temporada pasada en décimo cuarta posición y en la 2009-10, en quinto lugar, tratará de no pasar apuros y revivir épocas pasadas de la mano de Pablo Turrillas. A él se han sumado otras ocho incorporaciones que vivirán mañana su debut liguero lejos de Urbieta, en Eibar, concretamente.

Basconia y Balmaseda Los otros dos clubes vizcainos de la categoría, Basconia y Balmaseda, afrontan la nueva temporada con objetivos bien distintos. Así, los primeros, con Peio Agirreoa como técnico, tratarán de seguir creciendo con el objetivo de poder llegar a vestir algún día la elástica del Athletic.

En otra realidad se mueve el Balmaseda, que cuenta con el presupuesto más bajo entre los once equipos vizcainos de la categoría y que se marca la permanencia como principal objetivo en su regreso a la Tercera División después de 17 años de ausencia. Ahora, tras las balas de fogueo de la pretemporada, a ellos y a los otros diez conjuntos vizcainos les ha llegado el momento de la verdad. La hora de puntuar.