ATHLETIC DE BILBAO: Ainhoa; Iraia (Min. 60, Murua), Marta M., Tzibi, Ibarra; Itsaso (Min. 64, Joana), Olabarrieta, Guru, Orueta, Nekane (Min. 46, Gangoiti) y Erika.

BARCELONA: Rafols, Laura, Marta, Ani, Rocío, Romero, Elba (Min. 62, Cubi), Ali, Mari Paz (Min. 80, Clara), Olga (Min. 74, Silvia) y Lilo (Min. 62, Melani).

Goles: 0-1: Min. 71; Olga. 0-2: Min. 79; Melani.

Árbitro: Isturiz Latorre. Mostró tarjeta amarilla a la visitante Mari Paz.

Estadio: 6.000 personas en San Mamés.

bilbao. Una pena. Con todo preparado y con la grada de San Mamés apoyando a las rojiblancas, el Athletic se vio incapaz de encontrar un hueco, un resquicio para poder empatar la eliminatoria, e intentar ganar en la prórroga un choque que ofrecía el billete para la final a cuatro en Basauri. El juego de las catalanas fue más inteligente. Las de la Ciudad Condal se armaron de paciencia, contuvieron las leves embestidas de las bilbainas y cuando vieron que podían alzarse con la inesperada victoria, lo hicieron con autoridad, asestando dos cornadas mortales. Primero, lanzaron un par de avisos; pero Ainhoa demostró el por qué de su internacionalidad. Luego, el acierto visitante vino reflejado en un remate de Cubi, que acabó empujando en la misma raya Olga, tras el despeje de Ainhoa. Y, finalmente, en un impecable lanzamiento de falta directa de Melani desde más lejos del balcón del área.

Fue justo. A las bilbainas les pudo la presión y nunca se encontraron a gusto ante un rival serio y bien situado. Tras la primera parte, ya se vieron los atisbos de un posible fracaso. El Athletic dominaba por completo pero el Barça, con Mari Paz como estilete, daba muchos problemas. Las azulgranas firmes y seguras en defensa mostraban su descaro. El Athletic también tuvo en una llegada de Guru su mejor ocasión pero la extremo rojiblanca no pudo superar a Rafols que despejó con el pie. Solo quedaba la duda de si las visitantes iban a aguantar tras el descanso el asedio vizcaino, con el fuerte calor reinante. No sólo no se logró marcar, sino que las catalanas lograron un sorpresivo y merecido triunfo. Berasaluze alteró su once buscando soluciones. No era el día. Ni así. Ni Gangoiti, ni Joana, ni Murua consiguieron enderezar el rumbo del partido. Erika no conseguía zafarse de sus pares e Ibarra no apareció tanto como en la primera mitad. Llegó el primer tanto y cayó como un jarro de agua fría. Basauri estaba más lejos. A tres goles. Seguido, Melani marcó el segundo: el milagro era imposible. Expresiva fue la imagen final de desesperación por la impotencia que sentía Alberto Berasaluze y la desolación de las rojiblancas sobre el verde de San Mamés tras decir adiós al pase a semifinales.