barcelona-madrid-tenerife. El entrenador del FC Barcelona, Josep Guardiola, desveló ayer asuntos de cocina a raíz de alguna información en la que se decía que el técnico azulgrana abroncó en la media parte del encuentro en Stuttgart (1-1), cosa que negó al reconocer que en momentos de duda él siempre se propone para sugerir ayudas y soluciones, más que en gritar a sus futbolistas.

El Barcelona se enfrenta hoy al Málaga en el Camp Nou (21.00 horas, La Sexta), en la vigésimo cuarta jornada liguera; el Real Madrid al Tenerife en el Heliodoro Rodríguez (20.00 horas, Canal+ Liga y Gol tv) y el Getafe recibe al Tenerife en el Coliseo (18.00 horas, Canal+ Liga y Gol tv).

"Se equivocan. No había ni un medio de comunicación en el vestuario. Os equivocáis. Siempre se dicen cosas. La intención de mi mensaje en el descanso era que son unos jugadores maravillosos y que son muy buenos, y que no dudaran en que lo sacaríamos adelante, no sé si en la segunda parte o en el partido de vuelta. Esa era la intención de mi mensaje", informó Guardiola sobre el menaje que transmitió durante el partido de Stuttgart.

"Cuando las cosas van mal, jamás les grito. Jamás. Les grito cuando ganamos 4-0. Para que lo sepáis. Cuando perdemos, jamás les grito, porque si perdemos hay razones, y ellos sufren porque lo quieren hacer bien. Quieren sacar las cosas adelante y, como les entiendo, intento generar soluciones para que puedan jugar mejor. Dije muchas cosas, pero el tono era este", añadió.

El preparador barcelonista volvió a subrayar que ve a su equipo llegando a las máximas cotas de éxito al final de temporada, debido a la creencia ciega que tiene en sus jugadores y las posibilidades de estos, a pesar de que reconoció que el momento actual no es el mejor por el que está atravesando el Barcelona.

"Lo que quiero es que el equipo compita hasta el final en los dos torneos (Liga y Liga de Campeones). Es lo que me enseñó Ángel Mur (histórico masajista del Barça, ya retirado). El Barça siempre tiene que llegar hasta el final. Si después no ganamos, no nos reprocharemos nada. No sé si vamos a ganar. Siento que sí, que vamos a conseguir algo porque creo mucho en esta gente, pero puede ser que este año no lo consigamos; Pues no lo conseguiremos. Es deporte", razonó.

Finalmente, el entrenador catalán defendió sin fisuras el estilo del Barcelona, a pesar de los problemas que ha manifestado su juego para imponerse con superioridad a sus rivales.

En esta situación de dudas, el Barça recibe hoy al mejor Málaga de la temporada, después de una racha excelente de resultados que le han situado, incluso, como el segundo mejor equipo de la segunda vuelta, por encima de los barcelonistas.

Por su parte, el Real Madrid se enfrenta al Tenerife y los viejos recuerdos de dos Ligas perdidas en el estadio Heliodoro Rodríguez López hace 20 años. Recuerdos a los que los actuales jugadores son ajenos. Pero el Tenerife actual lucha por salvar la categoría y plantará cara a las estrellas madridistas. Y lo mismo hará el Zaragoza en Getafe.