Dar respuesta a los problemas que surgen y poder hacerlo en un espacio más corto de tiempo que el que es considerado como habitual y que como consecuencia mejore la calidad de vida de las personas es gracias a los avances que se están llevando a cabo en la ciencia, específicamente en la computación cuántica.
De hecho, es tal el impacto que podría llegar a cambiar la percepción existente sobre la misma. A día de hoy se están desarrollando muchos estudios para comprobar cuál puede ser el límite de esta ciencia y el impacto que puede llegar a tener en la ciudadanía.
Con el objetivo de poder conocer algunas pinceladas sobre la materia, DEIA, en un evento patrocinado por Telefónica, realizó una aproximación a la computación cuántica y sus diferentes aplicaciones en la sociedad haciendo especial hincapié en las virtudes y facilidad que tendrá para el desarrollo de Bizkaia.
Lo hizo en un foro celebrado este lunes en Euskalduna Bilbao. “La sociedad vasca, la sociedad en general, se encuentra en un momento crucial con las tecnologías emergentes que inciden en el día a día de las personas de manera profunda”, señaló la directora de DEIA, Marta Martín, al comienzo de la jornada.
La computación cuántica es uno de los temas que estarán presentes el próximo año ya que 2025 será el Año Internacional de la Ciencia y la Tecnología Cuántica. La Diputación Foral de Bizkaia, a través de Bizkaia Quantum Advanced Industries (Biqain), lleva trabajando en la materia durante los últimos años para consolidar a Bizkaia como un espacio líder en este sector.
“Somos un Territorio de alta innovación y esto coloca a Bizkaia en una posición ventajosa”, apuntó la diputada foral de Promoción Económica, Ainara Basurko. En este sentido, adelantó que próximamente “vamos a reunir todo el conocimiento cuántico que hay en Bizkaia en el Parque Científico y Tecnológico de Leioa”.
Al tratarse una ciencia que está por descubrir cuál es su verdadero potencial, los investigadores están estudiando las diferentes fórmulas en las que se puede emplear la misma. “En la parte de encriptación llevamos años haciendo pruebas cada vez más complejas y más cercanas al punto que queremos llegar que es el de cómo somos capaces de llevar la encriptación cuántica a nuestras redes habituales, las que solemos tener en casa o en cualquier empresa”, vaticinó el director de Telefónica en Euskadi, Javier Benito.
“Para llegar a ese punto le queda un tiempo a la tecnología”, añadió. No obstante, afirmó que “la computación cuántica nos va a cambiar a todos”. De hecho, Benito puntualizó que “nos está cambiando ya de una manera muy cercana toda la parte de seguridad en las redes”.
A día de hoy se desconoce cuál es el límite al que puede llegar la computación cuántica. El director de Innovación de Lantik, Valentín García, clarificó que “entre los distintos futuros que se pueden prever, en todos ellos hay algo que coincide y es que todo esto ha venido para quedarse y para influir tremendamente en nuestras vidas”. En este sentido, García matizó que lo hará con “muchísima intensidad”, sobre todo, en las próximas generaciones.
“Llegan momentos disruptivos y aquí estamos todas y todos intentando aprovecharlos y convertirlos en riqueza y en futuro”, manifestó el director de innovación de Lantik. “Esto va muy rápido”, expuso el CEO de Global DMTech, Joxe Etxebarria.
“Lo que hace tres años era una locura, en el caso de la Inteligencia Artificial, ahora lo hemos asimilado como algo normal”, ejemplificó Etxebarria, quien explicó que “a donde no llega la Inteligencia Artificial porque los algoritmos son muy complejos, hay muchos datos y muchas variables, lo podemos abordar con computación cuántica”.
El CEO de Global DMTech destacó dos labores que están llevando a cabo en la actualidad, entre ellas, “estamos ayudando a entidades bancarias a, en base a muchas variables, decidir dónde tienen que invertir el dinero. También optimizamos rutas de los camiones de recogida de residuos”.
“La gran diferencia entre la informática clásica y la cuántica, a simple vista, es la velocidad del resultado que se obtiene. Eso ocurre porque conceptualmente se procesa de una manera totalmente nueva la información”, aseguró el fundador de aQuantum, Guido Peterssen.
“Uno de los grandes retos que tenemos cuando trabajamos con la computación cuántica es que tenemos que terminar definiendo de todas esas probabilidades que nos da como resultado el ordenador, cuál queremos adoptar, como la vida misma”, planteó Peterssen.
“A día de hoy podemos resolver problemas de corta duración pero en cuanto se alarga hay incoherencias y no se termina, lo que obliga a programar de manera más secuencial”, resumió.
De 30 días a cuatro segundos
En los últimos años se ha avanzado mucho. “Cuando hagamos match con los tecnólogos y el negocio es cuando vamos a llegar al éxito”, indicó Joxe Etxebarria. Las evoluciones están siendo satisfactorias para llegar a una mejor sociedad.
Guido Peterssen comenzó, junto a setenta investigadores, un proyecto del que han obtenido unos resultados esperanzadores en cuanto a la receta de medicamentos. “Cuando empezamos a trabajar, en 120 variables se demoraban 30 días en obtener la respuesta de más o menos lo que debería ser la dosis optima”, contó.
Tras completar el estudio en el que el objetivo era el de buscar una dosis óptima, han logrado que en cuatro segundos se pueda saber cuál es la cantidad exacta que debe tomar cada paciente.
Futuro prometedor
“Esto nos ha permitido soñar y diseñar un modelo que va a ir incrementándose sumándose: química de los alimentos, actividad física, todo lo que incluso hoy en día no es controlado como pacientes que somos para lograr la exquisitez en la investigación”, añadió.
El futuro más inmediato de la computación cuántica en Bizkaia es muy prometedor. Para lograr un gran éxito, Valentín García remarcó la “magia de la colaboración público-privada”. “Bizkaia tiene acceso a la mayor parte de las tecnologías que nos permiten hacer computación cuántica”, sostuvo García.
Sobre este aspecto, el director de Innovación de Lantik auguró un buen futuro en las industrias vizcainas debido a la “ventaja que nos da” el hecho de contar con tanta variedad.
Proyecto 42
“Si solo pudieran hacer pruebas con una tecnología determinada y no fueran favorables dijéramos que habríamos perdido esa oportunidad. Si ahora podemos repetir esa prueba en hasta doce tecnologías diferentes, podríamos decir que tenemos doce veces más de probabilidades de éxito”, especificó García.
Para continuar con las investigaciones, es necesario contar con una serie de personal que a día de hoy es muy complicado de encontrar en el mercado laboral. Por ello, Telefónica, a través de un proyecto denominado 42, se encargan de formar a los profesionales del futuro.
“Hemos sido capaces de poner a disposición de todas las personas que están en 42 formándose con el modelo formativo de IBM partiendo del conocimiento informático y no siendo perfiles como físicos o matemáticos, etc., pero con unos conocimientos potentes en la parte de informática para dar el salto a ser capaz de programa a nivel de algoritmos cuánticos”, apostilló el director de Telefónica en Euskadi.