Las líneas que comienzan por números como 800, 900 o 901 suelen suscitar bastantes dudas, ya que no todos los usuarios tienen claro cuáles de ellos son de pago y cuáles son gratuitos. Para evitar sorpresas desagradables con tu factura de teléfono debes tener en cuenta los prefijos a los que llamamos, ya que cada vez necesitamos más recurrir a las empresas de servicios financieros o comerciales a los teléfonos de atención al cliente etc. y estos tienen unos prefijos singulares.

800 y 900

Tanto los números que empiezan por 800 como los que lo hacen por 900 son gratuitos, ya que son los propietarios de los mismos los que pagan su coste.

Estos números suelen corresponder a los servicios de atención al cliente de empresas de luz, gas o agua, y como hemos indicado, el usuario no tiene que pagar nada por llamar a los mismos.

901

En el caso de los números que empiezan 901, el usuario paga una parte de la llamada, cuyo importe se corresponde con lo que equivalía antes a una llamada local. El resto del coste de la llamada es asumido por el propietario de la línea. Estos son los números que se han utilizado frecuentemente en administraciones públicas como la Seguridad Social o la Agencia Tributaria.

Lo que ocurre con ellos es que sus precios se han mantenido, en tanto que el precio de los restos de llamadas ha bajado de unos años a esta parte, e incluso en muchos casos no hay que pagarlas por tener contratada una tarifa plana. De ahí que los precios de los 901 sean muy altos en estos momentos.

902

Al llamar a una línea 902, el usuario paga el coste total de la llamada. Por ello llamar a estos números resulta bastante caro. Pero desde el año 2020 está prohibido que las empresas utilicen estos números en sus servicios de atención al cliente, y si lo hacen para otros servicios, tienen que publicar siempre al lado de ese número otro de prefijo geográfico (que tendrá un coste normal).

En principio solo las empresas de luz y gas tenían prohibido utilizar una línea 902 en sus servicios de atención al cliente. Pero debido al gran abuso que muchas compañías han hecho de estos números, la limitación se ha ampliado a todas aquellas dedicadas a servicios básicos al consumidor como agua, seguros, servicios financieros, etc. Estas deben utilizar un número 800 o 900.

803, 806, 807 y 905

Son en principio los números con precios más elevados. Este tipo de números son utilizados por empresas que ofrecen un servicio durante la propia llamada. Y precisamente por ello suelen tener un precio bastante caro, yendo parte del beneficio de la llamada a la empresa propietaria del número, y el resto a la compañía telefónica.

Cada uno de estos números va dirigido a un tipo de servicio. Así, los que empiezan por 803 son servicios eróticos. Los 806 son servicios de entretenimiento como los juegos o el tarot. Los 807 son servicios profesionales como asesoría o servicios sanitarios.

En el caso de los 905 se usan para el televoto en programas de televisión y en este caso el usuario paga un importe fijo por la llamada, que suele ser también muy elevado.

118

Este tipo de número se utiliza como si fuera una guía telefónica. Además ofrecen progresión de la llamada, lo que quiere decir que hacen la llamada a ese número por nosotros si lo deseamos. Pero nos siguen cobrando como un 118, y este tipo de línea tiene un coste muy caro, que puede llegar a los 4 euros por minuto.

Las llamadas a estos números tienen algunas limitaciones. Si duran más de 15 minutos, se debe informar al usuario del precio de la misma.

Por otra parte, las empresas que prestan el servicio pueden fijar los precios que deseen, pero no podrán establecer un coste de establecimiento. Y siempre que el precio de la llamada supere los 2,5 euros por minuto, se requerirá la petición formal y expresa del usuario. Finalmente, el importe del uso de este tipo de servicios está limitado a 25 euros por llamada, un límite excesivamente alto según las asociaciones de consumidores.

911 y 912

Suelen generar dudas entre los consumidores pero en realidad los dos primeros números son el prefijo de los números fijos de la Comunidad de Madrid y son gratuitos. Así ocurre también con el 935, que es el de los números de Barcelona.