En tiempos de crisis que por un motivo u otro son una constante en la actualidad el ahorrar en los distintos aspectos de nuestra vida diaria nos puede servir de ayuda para afrontar los tiempos duros. Y es que el dinero cuesta mucho ganarlo, pero en cambio se va rápido si no controlamos nuestros gastos.

La mayoría de nosotros conocemos y ponemos en práctica pequeños trucos o estrategias para no gastar más de lo debido y aliviar el impacto de las facturas y los costes en nuestros bolsillos. El Día Mundial del Ahorro, que se celebra este domingo es una buena ocasión para recopilar algunos de estos trucos que le harán llegar a fin de mes de forma más llevadera.

Trucos que a unos les facilitará el ahorro pero que a otros no les beneficiará tanto. Como todo, al final es una decisión personal que implica alto grado de compromiso y fuerza de voluntad.

1. Fijarse de forma clara como objetivo el ahorrar dinero. Parece obvio pero el primer paso para ahorrar dinero es proponérselo. Es cierto que muchas veces podemos proponernos cosas y luego a mitad del camino podemos tirar la toalla. Fijarse esta meta es primordial.

2. Usar lo menos posible la tarjeta. La tarjeta puede ser una herramienta útil a la hora de comprar, pero también puede hacer que tengamos una percepción poco realista del dinero que tenemos y gastamos. Es mejor llevar el dinero justo que hacer un gasto excesivo con la tarjeta. Utilizar el dinero de plástico con racionalidad.

3. Hacer un presupuesto. Saber el dinero se lleva gastado cada mes en función de lo que se ha planeado gastar ayuda a poder planificar de cara al mes siguiente. No hace falta ser muy exigente, sino aplicar el sentido común.

4. Guardar el dinero en el banco también cuesta. Hay muchos bancos que cobran comisiones e intereses muy caros y a veces abusivos. Es bueno indagar y comparar si existen mejores opciones a nuestro actual banco. Muchas veces no lo hacemos por pereza o comodidad. Tener una cuenta ahorro en nuestra entidad financiera es muy interesante.

5. Guardar una pequeña cantidad fija cada mes. Es mejor empezar ahorrando al mes poco a poco, con una hucha o similar unas monedas. La satisfacción del objetivo conseguido será un estímulo para metas mayores.

6. Racionalizar las compras. No hay que comprar por comprar, sino adquirir las cosas que son útiles. Hacer una lista es imprescindible. Darnos un capricho de vez en cuando no es malo, pero no debe convertirse en habitual. Una buena estrategia para evitar comprar cosas innecesarias es esperar para tomar una decisión, es decir, pensar con la cabeza fría. Analizar los pros y contras de la compra, sobre todo si es un producto para varios años (electrodomésticos, coche, etc)

7. Utilizar tarjetas de fidelización o de cliente. Muchos establecimientos y compañías ofrecen pequeños descuentos y regalos para sus clientes. Siempre es bueno tener este tipo de tarjetas si se acude a menudo a ese lugar. Tiene el peligro, no obstante, de que esta tarjeta nos lleve a comprar más de lo que necesitamos.

8. Comparar. Es un verbo clave para ahorrar. No gastar por gastar y tener en cuenta que las ofertas en todos los ámbitos de consumo son muy variadas y accesibles. Internet es una buena herramienta de ayuda.

9. Informarse de cómo ahorrar. Existen multitud de libros, manuales, artículos periodísticos o vídeos tutoriales que ofrecen gran cantidad de consejos para ahorrar dinero. También sobre aspectos concretos de motor, electricidad, viajes.... y numerosos ámbitos de nuestra vida.

10. Pensar en lo que cuesta ganar el dinero..El dinero cuesta mucho ganarlo, mucho sudor y horas de trabajo invertidas y se va en un santiamén. Reflexionar es bueno para evitar compras compulsivas.

11. Comer en casa. No es tan cómodo como hacerlo en un restaurante, pero si se puede hacer es más barato, más sano y más divertido. Y evita gastos en conceptos asociados más viciosos como alcohol, tabaco, etc.

12. Aprovechar las ofertas. Los establecimientos tienen habitualmente productos de descuento por tamaño, dos por uno, etc. Hay que estar atento a estas ofertas, ya que comprar con inteligencia permite ahorrar mucho dinero al mes.

Esta docena de consejos genéricos pretende ayudar a cambiar hábitos y comportamientos y establecer patrones de conducta, pero hay acciones concretas que pueden suponer un ahorro interesante. Son trucos específicos que le vendrán bien para gastar menos.

Energía. Revisar contratos de luz, estudiar la discriminación horaria, conducir el coche de forma eficiente y con un mantenimiento adecuado, usar más el transporte público. Ajustar termostatos en casa, no dejar luces encendidas y poner la lavadora por la noche.

Ropa. Comprar sólo la ropa que se necesita y aprovechar las rebajas y los outlet (tiendas de oportunidades). No concentrar las compras en temporada alta. Realizar pequeños arreglos en la ropa antes que tirarla.

Telecomunicaciones y seguros. No sea fiel a su compañía de siempre. En el mercado hay multitud de ofertas interesantes. Acudir a un corredor para encontrar seguros más baratos y adecuados a nuestras necesidades y con las coberturas que realmente necesitamos.

Vacaciones y viajes. Reservar con tiempo y evitar las temporadas altas, planificando gastos, incluso los caprichos y los posibles imprevistos.

Segunda mano. Las aplicaciones y establecimientos de productos usados ofrecen ya las garantías y la calidad suficientes como para confiar en ellas.

Motor. Consultar en internet y repostar en las gasolineras más baratas. Cumplir con los plazos de mantenimiento y medidas de seguridad.

Alimentos. Cocinar con eficiencia, no tirar alimentos y optimizar el uso de la nevera.

Estos son algunos consejos para gastar menos, pero seguro que si usted se para a pensar podrá encontrar además muchos pequeños trucos que le ayudarán a ahorrar. Y quien sabe si con ello a darse un capricho...