En Euskadi, la apuesta por la energía renovable empieza a notarse en fábricas, edificios públicos y viviendas. Cada vez más empresas y particulares optan por generar parte de la electricidad que consumen. La razón no es solo ambiental: reducir costes y generar su propia energía se ha convertido en una necesidad para mantener la competitividad.

En este contexto, las ayudas públicas se han consolidado como el principal motor de cambio. Entre ellas, destaca el nuevo programa lanzado por el Ente Vasco de la Energía (EVE), con una dotación de 80 millones de euros destinados a impulsar el autoconsumo en todo tipo de instalaciones y con previsión de implementar otro programa de 80 millones más en 2027.

“Hemos diseñado el programa más ambicioso de los últimos años. No hay límite de potencia ni de tipo de destinatario”, explica Natalia Díaz de Arcaya Sáez de Vicuña, responsable del Área de Ayudas y Servicios de Valor del EVE. La convocatoria cubre instalaciones fotovoltaicas y eólicas, tanto conectadas como aisladas, y está abierta a todos los sectores. La única limitación se aplica al almacenamiento: 5 kilovatios hora por cada kilovatio instalado.

"Hemos diseñado el programa más ambicioso de los últimos años. No hay límite de potencia ni de tipo de destinatario"

Natalia Díaz de Arcaya Sáez de Vicuña - Responsable del Área de Ayudas y Servicios de Valor del EVE

El espíritu del plan es, según Díaz de Arcaya, impulsar el autoconsumo como modelo energético transversal, con especial atención a la industria. “Queremos que las empresas vean el autoconsumo no solo como una inversión, sino como una herramienta que mejora su competitividad. Es un momento propicio: hay ayudas directas, desgravaciones fiscales y un ahorro estructural al evitar cargos en la factura eléctrica”. Con estas medidas, el EVE prevé que en los próximos dos años se pongan en marcha 150 megavatios adicionales de autoconsumo, el doble de la potencia acumulada hasta ahora en Euskadi.

Diversas subvenciones

Las subvenciones varían en función del tamaño de la empresa y de la potencia instalada. En generación eléctrica, el rango de ayuda va del 25% al 45% de la inversión, mientras que para almacenamiento con baterías puede alcanzar entre el 45% y el 65%. Además, existen incentivos adicionales para proyectos que coloquen paneles en marquesinas de aparcamientos o cubiertas donde se haya retirado amianto. “Queremos fomentar que la fotovoltaica se integre en otros espacios y usos. Las marquesinas son una buena oportunidad para aprovechar zonas ya construidas y generar energía sin ocupar suelo ni tejados”, explica la responsable.

En generación eléctrica, el rango de ayuda va del 25% al 45% de la inversión, mientras que para almacenamiento con baterías puede alcanzar entre el 45% y el 65%

El programa también abarca la electrificación de sistemas térmicos, con ayudas para la instalación de aerotermia, geotermia e hidrotermia. “No todo es electricidad. También apoyamos sistemas térmicos limpios con altos rendimientos”, señala. La intención es facilitar la sustitución de combustibles fósiles por soluciones renovables tanto en viviendas como en edificios públicos o naves industriales.

Otra de las novedades es su flexibilidad. Las ayudas pueden combinarse con otros programas, dentro de los límites que marca la normativa europea, y permiten presentar más de una solicitud por punto de suministro si se trata de proyectos distintos o ampliaciones. “Queremos acompañar a las empresas en todas las fases, con cercanía y adaptabilidad”, añade Díaz de Arcaya. El EVE, subraya, no solo gestiona las ayudas, sino que también ofrece reuniones bilaterales y jornadas informativas para orientar a las entidades solicitantes.

"Queremos que la industria vasca sea referente en descarbonización y que cada empresa encuentre en el EVE un socio para avanzar en ese proceso"

El programa se enmarca en el plan Deskarboniza, una estrategia común de tres entidades como el EVE, IHOBE y SPRI que integra todos los instrumentos públicos en materia de eficiencia energética, energías renovables y tecnologías limpias. “Nuestro mensaje es muy claro: más industria, mejor industria y menos emisiones”, resume Díaz de Arcaya. “Queremos que la industria vasca sea referente en descarbonización y que cada empresa encuentre en el EVE un socio para avanzar en ese proceso”.

Energía solar sobre tejavanas

Aparcamiento del centro ITP Aero ubicado en Zamudio (Bizkaia). Cedida ITP

El impacto del programa ya se percibe en proyectos concretos. En el aparcamiento de su centro de Zamudio (Bizkaia), ITP Aero ha instalado paneles fotovoltaicos sobre estructuras metálicas, conocidas como tejavanas o pérgolas, con una capacidad cercana a un megavatio. La actuación, que ha contado con apoyo del EVE, permite generar energía solar aprovechando el espacio del parking sin ocupar las cubiertas de los edificios.

“Las tejavanas permiten producir energía y, al mismo tiempo, ofrecen sombra y protección frente a la lluvia para los vehículos de los empleados”, explica Rafael Castro Prado, director de fábrica de las instalaciones de fabricación avanzada de la compañía. Este diseño convierte un espacio de uso diario en una fuente adicional de energía limpia para el autoconsumo del centro.

"Las tejavanas permiten producir energía y, al mismo tiempo, ofrecen sombra y protección frente a la lluvia para los vehículos de los empleados"

Rafael Castro Prado - Director de fábrica de las instalaciones de fabricación avanzada de ITP Aereo

El objetivo de ITP Aero es asegurar un coste energético estable y predecible a largo plazo. “Aunque no siempre es la opción más barata, la energía solar ofrece estabilidad frente a las fluctuaciones del mercado”, apunta Castro. Las ayudas del EVE fueron determinantes para la viabilidad del proyecto. "Gracias al apoyo público, el coste por megavatio hora se aproxima al de zonas con mayor radiación solar anual, lo que nos permite mantener la competitividad", añade.

Además de contribuir a la reducción de emisiones de CO2 del centro de Zamudio, el proyecto se integra en la estrategia global de descarbonización de la empresa. "Esta estructura facilita aprovechar espacios exteriores y puede replicarse en otros centros", concluye.