Tal y como estaba previsto, el secretario general de ELA, Mitxel Lakuntza, ha sido reelegido con el 90,37% de los votos para liderar el sindicato otros cuatro años, en los que la estrategia de confrontación seguirá siendo su seña de identidad. De hecho, esta ha sido una de las principales ideas que han centrado su 16 Congreso, que concluyó este martes con el visto bueno de los delegados presentes a un nuevo comité ejecutivo de 12 miembros y encabezado por Lakuntza, en el cargo desde 2019. “Hemos ganado la lucha por el modelo sindical”, comenzó el secretario general en el cierre del encuentro. “No es cierto que todo el sindicalismo esté en crisis, no todos estamos en crisis. Quienes no han optado por el contrapoder y la confrontación están en crisis. Existen diferentes modelos sindicales y el nuestro ha ganado. Esa es nuestra victoria”, señaló en un discurso en clave política en el que no escatimó en críticas.
“Si no quiere huelga, el lehendakari sabe el camino: que abandone el autoritarismo y dé paso a la negociación”, apuntó en referencia a los conflictos en Osakidetza, educación o las residencias. “Superamos ese bloqueo gracias a la huelga y por eso conseguimos convenios. Por eso Euskal Herria es una excepción sindical”, presumió. También hubo para la presidenta navarra, María Chivite: “Dijo hace un tiempo que no había futuro fuera del diálogo social. Se equivocó. Tanto en Nafarroa como en la CAV, quienes han apostado por el diálogo social han perdido apoyo. De esas mesas creadas por gobiernos y empresarios no sale nada positivo para los trabajadores”, aseguró Lakuntza. Hay que recordar que ELA y LAB coinciden en su rechazo al diálogo social, pero también tienen sus discrepancias, que este martes volvieron a ponerse sobre la mesa.
Invitado al congreso, el coordinador de LAB, Igor Arroyo, reconoció en una intervención anterior que ambos sindicatos “proponemos caminos diferentes”. “Hay una realidad que debemos admitir y naturalizar y es que en los últimos tiempos, a pesar de haberlo intentado, muchas veces no hemos logrado ponernos de acuerdo”, señaló. Sin embargo, añadió que, a pesar de no ir de la mano en sus estrategias, “no somos enemigos ni adversarios”. “Tenemos muy claro quién es el enemigo: el capital, el patriarcado, el colonialismo, la negación de la nación”, señaló.
La Izquierda
Un día antes, Lakuntza había lanzado críticas directas a Podemos y a EH Bildu, y en la clausura del congreso volvió a cargar contra la izquierda. “Necesitamos otros políticos, empezando por la izquierda. Necesitamos que la izquierda se enfrente a la derecha”, señaló. Además, aseguró que su sindicato va a defender “un derecho fundamental”. “Este sindicato tiene todo el derecho a hacer política, porque las políticas que se adoptan afectan a los trabajadores. ¿Dónde está escrito que el principal sindicato de este país no puede hacer política?”, criticó.
Y defendió una vez más su modelo de confrontación: “Gracias a nuestro modelo sindical, nuestro modelo de confrontación y contrapoder, hemos logrado victorias contra la precariedad y hemos logrado acuerdos mejores”, señaló. En este sentido, rechazo que el objetivo de ELA sea el conflicto en sí mismo. “Si hay contenido, firmamos. Somos los que más acuerdos firmamos cada año, pero el objetivo es firmar buenos acuerdos y a menudo eso no es posible sin conflicto”, concluyó.
