La falta de obra nueva para hacer frente a la alta demanda que registran muchos mercados del Estado sigue tensionando al alza los precios, uno de los indicadores que aún resiste en esta coyuntura de parón de compraventas y de concesión de hipotecas. De hecho, el número de viviendas iniciadas entre enero y junio se aproximó a las 50.000 unidades. Sin embargo, desde 2008 –en pleno boom del sector inmobiliario– solo se ha superado esta cifra en 2019, previo al impacto del covid-19, con más de 52.200 casas, de acuerdo con los últimos datos del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.

Entre los grandes mercados en el primer semestre de 2023 el mayor número de viviendas iniciadas se localizó en Andalucía con casi 12.000 viviendas iniciadas. Por su parte, en la Comunidad de Madrid se iniciaron 7.255 viviendas, en Cataluña 6.391 y en la Comunidad Valenciana 6.065. Además, en el primer semestre de este año se terminaron 40.707 viviendas, el 5 % más que en el mismo periodo del año anterior. Es la mayor cifra desde 2021, cuando se rozaron las 41.500. En 2006, en pleno “boom”, se registraron más de 600.000 viviendas iniciadas y casi las mismas acabadas

Desde que se inició la serie histórica de esta estadística, en 1991, el mayor número de viviendas en un ejercicio completo se dio en 2006, en plena expansión del sector, con 664.923 unidades. Así, coincidiendo con el sobrecalentamiento del mercado, entre 2004 y 2007 el número de viviendas iniciadas estaba por encima de las 600.000.

Por el contrario, el mínimo anual se marcó en 2013, tras el estallido de la burbuja inmobiliaria, con 29.232 viviendas libres iniciadas.