BILBAO. La empresa Wartsila Ibérica, una multinacional finlandesa, destinará alrededor de siete millones de euros entre 2012 y este año al centro de Investigación y Desarrollo (I+D) instalado en su sede central de Bermeo. Las inversiones se dedicarán al desarrollo de nuevos motores de gas y duales y a un banco de pruebas. Wartsila Ibérica acaba de celebrar su 25 aniversario como el mayor suministrador del Estado de motores y sistemas completos de propulsión, incluyendo reductoras, líneas de ejes, hélices y controles remotos para la industria de la construcción naval. Y lo hace manteniendo su apuesta por la innovación con la citada inversión de siete millones, según publica en su último número Estrategia Empresarial.

Además, también destaca como promotora en el uso de sus motores para la producción eléctrica y cogeneración en instalaciones terrestres. La compañía cuenta con una plantilla de 222 trabajadores entre sus centros de Bermeo, Santander, Málaga, Las Palmas y Oporto, con una facturación media en los dos últimos ejercicios en torno a los 80-85 millones de euros. Su actividad la divide entre las áreas de marino, plantas industriales, servicio posventa, I+D y fabricación de hélices y sus componentes.

Hace unos 15 años, Wartsila puso en marcha su centro de I+D en Bermeo, donde desarrolla las fases de diseño y maduración de motores, así como diferentes pruebas antes de su lanzamiento al mercado. El centro cuenta con motores de gas y duales (gas/diesel) de última generación y en la actualidad está ampliando esta actividad con la instalación de un nuevo banco de pruebas para desarrollar proyectos de investigación adicionales. El pasado año invirtió unos 3,5 millones de euros y desembolsará la misma cantidad en este. Entre los meses de febrero y marzo estará operativo el nuevo banco de pruebas y para finales de año contará ya con el primer prototipo dual de otro motor de última generación.

Los armadores de Bermeo han vuelto a confiar en el saber hacer de Wartsila y en 2012 se mostraron especialmente activos, encargando a esta empresa el suministro de los equipos de propulsión para cinco nuevos atuneros que se entregarán a lo largo de este año, lo que ha proporcionado un colchón importante en la facturación de la empresa.

Wartsila Ibérica ya ha entregado unos 500 motores de diferentes gamas y potencias, así como equipos auxiliares, para todo tipo de naves, desde pesqueros hasta buques para el transporte de gas licuado o naves para explotaciones petrolíferas, entre otros. Además, en instalaciones industriales es uno de los mayores suministradores de la península de plantas eléctricas de generación y cogeneración usando fuel-oil y gas como combustible, con diseños llave en mano para plantas de entre 1 y 500 megavatios (MW).

Por otra parte, Wartsila ha conseguido un contrato para suministrar la maquinaria de propulsión alimentada por gas natural licuado (GNL) y los correspondientes sistemas de almacenamiento y gestión del mismo para un nuevo ferry de pasajeros. El buque ha sido contratado por el operador canadiense Société des Traversiers du Québec (STQ) y será el primer transbordador en Norteamérica alimentado por GNL. El barco está siendo construido por Fincantieri Cantieri Navali Italiani (Italia) y será utilizado en las rutas que cruzan el río San Lorenzo. El contrato de Wartsila se firmó en octubre pasado, el equipo será suministrado en otoño de este año y la entrega del buque se prevé para finales de 2014.

Wartsila integró en el año 2008 sus operaciones en la península, lo que supuso la incorporación del negocio de fabricación de hélices y repuestos. Desde entonces, su fábrica de Maliaño (Cantabria) ha crecido de forma importante, alrededor del 68%, tras una inversión de seis millones de euros, consolidándose como la única fundición del grupo en Europa.

Además, recientemente, Wartsila ha adquirido los grupos Cedervall -especializada en la fabricación de cierres para líneas de ejes, cojinetes y otros componentes para la industria naval- y Hamworthy, una ingeniería que suministra equipos y sistemas para el sector naval.