Donostia. El proceso de fusión de los centros tecnológicos Cidemco, Esi, Euve, Fatronik, Inasmet, Labein, Leia y Robotiker para la puesta en funcionamiento de Tecnalia Reseach and Innovation (TRI) chocó ayer con la negativa de Labein a aceptar el protocolo de fusión. El principal escollo sigue siendo la ubicación de la sede, establecida en principio en Gipuzkoa, aunque el protocolo establece la posibilidad de que la sede sea rotatoria.
Se desconoce el alcance de la decisión de Labein, que incluso puede no acudir hoy a la firma de la fusión. Los siete restantes centros cuyos patronatos han aprobado los estatutos de integración han decidido continuar adelante con el proceso y celebrar el acto de firma de la fusión, que tendrá lugar hoy en Donostia. Todo queda ahora en el aire, vinculado a lo que decida Labein, cuyo patronato se reunirá también hoy para decidir si asume el acuerdo.
El comité de integración de Tecnalia se reunió ayer con carácter urgente con el fin de buscar una salida in extremis, tras conocer el nuevo rechazo de Labein, el segundo que se produce en este proceso.
Para solventar esta o cualquier otra coyuntura negativa en este proceso de transición se ha creado un comité, que estará por el presidente de TRI y dos representantes de los centros tecnológicos guipuzcoanos y otros dos por los vizcainos. En este comité estaba prevista la presencia de sendos miembros de las diputaciones de Gipuzkoa y Bizkaia, que han rechazado la invitación por motivos ajenos al proceso.
Si durante estos seis meses siguen los problemas con la ubicación de la sede definitiva al final se ha decidido optar por un sistema rotatorio por períodos de 18 meses entre los dos territorios y que comenzaría por Gipuzkoa. Como es obvio esta es la solución que nadie quiere por lo que representa y revela de cara al exterior.
Otro punto importante del acto de la firma de la fusión de hoy, es conocer el alcance del convenio que el departamento de Industria quiere firmar con TRI y que ha provocado alguna diferencia en los centros fusionados, al entender que puede haber cierta injerencia por parte del Gobierno vasco. En este caso, el reciente convenio de Industria con la plataforma IK4 está sirviendo de referencia.