Lekeitio - Aitor Altzibar ha pasado en unos pocos días de estar dirigiendo a la trainera B de Bermeo a verse en la pelea de la Bandera de La Concha. La destitución de Joseba Fernández ha dado una oportunidad al lekeitiarra y, con poco más de una semana en el cargo, tiene el objetivo de devolver la confianza a un grupo que necesita creer en sus posibilidades. La cita donostiarra es la última gran opción de Urdaibai. Su temporada le deja fuera de los principales favoritos, pero los bermeotarras son un grupo competitivo y cuando están a su mejor nivel pueden derrotar a cualquiera. Volver a ese escenario es el deseo de Altzibar.

Se produce la baja de Joseba Fernández y le proponen a usted ponerse al frente de Urdaibai a poco más de una semana de la Bandera de La Concha. ¿Cómo vivió todo esto?

-Me llegó un poco de sopetón, pero, ya que estamos integrados en el organigrama del club, había que cogerlo. Intentamos plantearlo de una forma en la que hay que mejorar pequeños detalles para que los remeros lleguen bien a la cita donostiarra.

¿Qué teclas ha tocado en los pocos días que lleva al mando de la ‘Bou Bizkaia’?

-Tocar, poco, ya que no se pueden hacer muchas modificaciones a estas alturas. Lo que estoy haciendo es hablar mucho con los remeros, porque tienen experiencia a la hora de sentir el bote. Trato de buscar ese feedback con ellos, de ver cómo sienten el bote y saber si están bien para, a partir de ahí, intentar preparar la embarcación teniendo en cuenta esas sensaciones. Se trata de que vayan en otra dinámica y que hagan una remada en la que vean ellos que puedan estar tranquilos.

¿Cuáles son las sensaciones que le ha transmitido el equipo?

-He tenido bastante buenas sensaciones. Se ve que es un bote muy fuerte, que corre, pero luego en la regata hay ciertos momentos que va muy bien y luego hay otra parte que le cuesta mucho. Entonces, el objetivo es que los remeros se relajen un poco para que esos dos largos buenos pasen a ser tres y, si se puede, intentar el cuarto para entrar en la cabeza.

¿Qué tal es su relación con los remeros?

-Ya les conocía personalmente, pero en la dinámica de entrenamientos no había estado porque dirigía a la B. Pero es gente de equipo y que tiene las cosas claras: hacen una piña para sacar adelante la situación. También han sabido estar ahí ante las adversidades que han tenido en otras temporadas. Han sabido soportar esa presión y está claro que han demostrado que forman un equipo muy capacitado para sacar adelante esta situación.

¿Qué estrategia lleva a la hora de dirigir al equipo antes de una cita como la Bandera de La Concha?

-Lo primero es hablar con los remeros, porque ellos tienen más experiencia que yo en estas situaciones. En lo que respecta a mí, lo que intento es que tengan buenas sensaciones. Mi objetivo es ese y que vayan a la regata con ganas, con ansias de ganar y que sea lo que tenga que salir.

¿La tripulación cree en la victoria en la bahía donostiarra?

-Acabamos de hacer el viaje de Galicia y los remeros vinieron contentos, con una sensación buena, creyendo que se puede. Tienen ganas de intentarlo. No sé si en la victoria, pero el equipo cree que hay posibilidades de estar en la pelea.

Se habla mucho del ‘trece’ de Urdaibai que venció en el Campeonato de Bizkaia, ¿cuál es su nivel real?

-El trece es bueno, pero necesita confianza en sí mismo, ya que en la liga ha estado un escalón por debajo de lo que se esperaba. Ha habido dos o tres semanas que había dudas con la gente debido a las lesiones, pero parece que están recuperados. Hay algún achaque, pero están bien y en ese sentido no creo que haya ningún problema.

La primera prueba será la clasificatoria de este jueves.

-Es el mayor miedo que tengo. Normalmente, los siete primeros de la liga entran y no suele haber sorpresas. Aunque siempre queda esa duda. Una vez dentro, me relajaré un poco y estoy seguro de que los remeros se van a crecer más.

¿Cómo ve la primera jornada?

-La clave del primer domingo es no fallar. Hay que estar en la pelea con todos y no quedarse atrás.

Para ello, el factor suerte también será importante.

-En la Bandera de La Concha una parte importante es tener suerte. No es lo mismo salir en la primera tanda o en la segunda. Los largos son muy largos y una pequeña modificación del viento o la corriente puede afectar mucho. El objetivo del primer día tiene que ser estar ahí, en una situación que se pueda recortar si vas por detrás.

Esta temporada ha estado marcada por la igualdad. ¿Cree que el segundo día habrá que estar pendiente de los botes de la primera tanda?

-Está claro que todas las tripulaciones que entren este año en La Concha van a tener opciones de estar en la pelea. Aunque estemos en la tanda buena, habrá que mirar con otro ojo a la primera.

¿Hay algún favorito?

-A Orio le veo muy bien. Lo ha demostrado en la liga y, aunque haya hecho alguna que otra regata que no le ha salido tan bien, creo que es la trainera más segura para ganar. También está fuerte Hondarribia.

¿Existe la presión de la última bala en Urdaibai?

-No tenemos que tener presión. Está claro que va a haber, pero los remeros cuanto más se olviden de eso y más vayan a disfrutar, saliendo convencidos de que pueden hacerlo, mejor lo van a hacer. Yendo la temporada del modo que ha ido y viendo la situación, está claro que hay que buscar acabar bien, pero ganar tampoco es una obligación. Lo más importante es crear esa ilusión para este año y el siguiente.