Garbiñe Muguruza ya está en tercera ronda de Wimbledon y con buenas sensaciones en su juego. Las otras dos ocasiones en que alcanzó este punto en la hierba londinense llegó a la final. Ayer miércoles la de Caracas se impuso a la neerlandesa Leshley Pattinama-Kerkhove por 6-1 y 6-4 en un partido que duró poco más de una hora y que Muguruza dominó, salvo en el tramo central del segundo set. Después de un par de juegos de tanteo, ya que ambas solo se habían enfrentado una vez hace siete años, la vasco-venezolana puso la directa y se anotó el set con mucha autoridad, firmeza en el saque y buenos golpes ganadores.

Pattinama-Kerkhove cogió el hilo en el segundo set y llegó a colocarse con 4-2 a favor después de que Muguruza cediera por única vez su servicio. Pero la campeona de 2017 se rehizo pronto y recuperó el mando y el control para anotarse los cuatro últimos juegos y colarse en la tercera ronda donde le toca la tunecina Ons Jabeur, 21ª cabeza de serie, que es peligrosa ya que ganó hace un par de semanas el torneo de Birmingham y ayer miércoles apeó a Venus Williams. "Este torneo es un poco traicionero, y hay que ir partido a partido, más con mi historial, que o me voy muy pronto o llego hasta el final. Quiero jugar como lo vengo haciendo, hacer una buena ejecución y no mirar al cuadro", comentó Muguruza.

El cuadro femenino vio caer ayer miércoles a Sofia Kenin, cuarta favorita, a Bianca Andreescu, la quinta, y a Belinda Bencic, la novena. En cambio, Paula Badosa logró su primera victoria en Wimbledon ante Aliona Bolsova en un bonito duelo de catalanas que se estrenaban en la hierba de Londres y Sara Sorribes tuvo que luchar para vencer a la croata Ana Konjuh y encontrarse con Angelique Kerber, la campeona de 2018.

En el torneo masculino, Novak Djokovic se mostró firme y no dio ninguna opción a Kevin Anderson, su rival en la final de 2018, al que superó por un triple 6-3. Su próximo rival será el estadounidense Denis Kudla. "Mi objetivo prioritario son los Grand Slams y los Juegos", insistió el serbio, que va a lo suyo con mucha decisión. Ante el surafricano solo cometió siete errores no forzadas.

La jornada de ayer miércoles vio la primera victoria en Wimbledon y en un partido de Grand Slam a cinco sets de Carlos Alcaraz ante el japonés Uchiyama. El joven murciano jugará hoy en segunda ronda ante Daniil Medvedev, un reto para él en el que no tiene nada que perder, pero querrá dar la máxima batalla a uno de los favoritos.

La decepción se la llevó Pablo Carreño, que sigue sin ganar un partido en Wimbledon después de seis participaciones. El asturiano tuvo un sorteo trampa y cayó ante el estadounidense Sam Querrey, semifinalista en 2016 y que en la hierba se mueve de maravilla. También cedió Fernando Verdasco ante Grigor Dimitrov.