Competir en los dos primeros domingos de septiembre es el gran sueño de todos los remeros. Es la cita más deseada del calendario, la Bandera de La Concha. Varios días antes los billetes entran en juego en lo que acostumbra a ser una fiesta del remo, con decenas de traineras esperando en las inmediaciones de la bahía donostiarra antes de empezar a competir en busca del gran objetivo. Esta temporada, la situación creada por el coronavirus provoca que la fiesta sea menor y la clasificatoria quede dividida en dos días. Hoy, a las 17.30 horas será el turno de las traineras femeninas. 14 embarcaciones pelearán por uno de los siete huecos para acompañar a Donostiarra, ya clasificada, y entre ellas estarán Ondarroa, Isuntza y Lutxana. Deusto, por su parte, no podrá participar debido al positivo por covid-19 de una de sus remeras.

Ondarroa afronta está clasificatoria con más opciones de entrar que nunca y esas buenas sensaciones se reforzaron después de lograr una victoria “inesperada” el pasado domingo en Castro Urdiales. Las ondarrutarras finalizaron cuartas en la ETE y esperan dar otro pasito más para entrar en La Concha. “Vamos a hacer todo lo posible para entrar y vamos con más ilusión y ganas que nunca, porque también vemos esas posibilidades”, declara Nagore Osoro, la entrenadora. Aunque este joven proyecto todavía está dando sus primeros pasos, por lo que hacerse con un puesto para la cita donostiarra no es una obligación: “Tampoco pasa nada si no entramos. Antes del confinamiento no me imaginaba estar tan arriba, pero también se ha visto que a la mínima te vas para abajo. Tenemos que hacer todo bien y aun así costará”.

Menos opciones tiene, a priori, Isuntza. Los fríos número no favorecen a la trainera lekeitiarra y sobre el papel colocan a bastantes embarcaciones por delante. Es la ilusión lo que da fuerzas al equipo y el arma con el que quieren romper la estadística. “Sabemos que está difícil porque hay mucho nivel. La percepción que tenemos nosotros es que hemos ido un poco a más durante la temporada, aunque no se reflejó en los resultados. Ha habido regatas que hemos estado cerca y por lo menos vamos a La Concha a disfrutar y luego a ver qué pasa”, comenta su entrenador, Iñaki Badiola, quien sabe que necesitan algo más que una buena actuación para entrar en la Bandera de La Concha: “Tenemos que hacer una regata perfecta y que nos ayudasen factores externos”.

Esta clasificatoria será histórica para Lutxana. Será el estreno de la Ederra en la bahía donostiarra y solo participar supone un gran éxito para el club. “Es un sueño hecho realidad. El año pasado tengo el recuerdo de mirar a las compañeras con las que había estado toda la vida en Lutxana y pensar que había que traer aquí a la Ederra. Ahora lo importante es que no sea el último”, afirma Ainhoa Zurinaga, la entrenadora. Es la primera temporada del equipo en el agua y en el equipo son conscientes de sus posibilidades: “Vamos principalmente a disfrutar. Es el premio para finalizar la temporada, sobre todo, para las más jóvenes del equipo. Intentaremos hacer una buena regata y acabar el año contentas. Ir sin presión nos permitirá ir con mas tranquilidad”.