Con el PGA Tour a punto de vivir su reinicio, los golfistas del circuito europeo continúan a la espera de disfrutar de la competición. Los momentos de confinamiento ya quedaron atrás y los entrenamientos vuelven a parecerse más a las rutinas habituales. Pero todavía falta para que el European Tour vuelva a disputarse. Adrián Otaegui realizó los primeros entrenamientos tras la cuarentena sin saber cuándo podría regresar a la actividad y el anuncio de la reanudación, que será el 22 de julio, da un impulso mayor al donostiarra. Los primeros torneos serán en Reino Unido y, a partir de ahí, comenzarán los viajes por el mundo. La idea de Otaegui es evitar los aviones y viajar en coche por el viejo continente para acudir a la siguiente cita. Lo hará pleno de motivación por poder competir por fin tras una espera que se ha hecho larga.

El coronavirus generó diferentes situaciones en las personas que tuvieron que quedarse confinadas. ¿En su caso cómo transcurrieron esos días?

—He pasado las diferentes fases de cuarentena. Como siempre estoy de atrás para delante, cada semana en un sitio, y me paso el día en el campo y al aire libre; pero sí que ha sido una experiencia diferente. Ahora estoy contento y a gusto al estar entrenando otra vez. Además desde hace pocos días nos han dicho el calendario que va a haber cuando regresemos y ya no tenemos que estar entrenando sin una fecha en mente. Ahora podemos hacer una planificación más precisa para llegar bien a esa tercera semana de julio. Me quedan cinco semanas para seguir preparándome física y mentalmente con la intención de llegar en el punto más alto posible a la reanudación de los torneos.

El golfista acostumbra a tener todo su calendario bien organizado y a fijar sus objetivos. ¿Es difícil entrenar sin ninguna meta en el horizonte?

—Para mí, eso era un poco lo más raro, lo que se me hacía más difícil. Durante la cuarentena había tocado el palo lo máximo posible para que no se fuera el feeling y el día 11, cuando volví a entrenar, las sensaciones fueron buenas. Pero lo peor era eso, entrenar sin saber para cuándo o para qué fecha. Intentas mejorar un poco cada día, que al final es el objetivo cuando entrenas, dar un pasito hacia delante. Sin embargo, sabiendo ahora la fecha de los dos primeros torneos es mejor y es más fácil planificar la temporada; en este caso, con las miras puestas a finales de julio.

¿Qué opina sobre el sistema de competición que propone el European Tour?

—El European Tour ha dicho que va a haber un ranking, pero las categorías se mantienen de cara al año que viene. Esta temporada no va a haber escuela y nadie sube del Challenge. Me parece una decisión acertada, porque no sabemos qué cantidad de torneos vamos a jugar. En el circuito europeo juega gente de todo el mundo y habrá golfistas que, aunque quieran, no van a poder viajar a otros países. Con tan pocos torneos, me parece una decisión acertada y lógica que se mantengan las categorías para el año que viene.

¿Y sobre el nuevo calendario?

—Desde principios de año tenía el calendario bastante marcado y ahora son torneos nuevos. Los seis primeros son en el Reino Unido y, quitando uno, el resto se han creado después del parón para concentrarlos todos en el mismo país. Son torneos con menos premio, pero al final todo lo que sea jugar es bueno. De momento, si voy al Reino Unido, será para estar en los seis torneos y, después de tanto tiempo sin jugar, tengo mucho mono y ganas de competir, de sentir esa adrenalina de la competición. Luego, ya se verá qué torneos vienen en septiembre y octubre, que todavía no han sacado el calendario.

El European Tour cuenta con el hándicap que se disputa en todo el mundo.

—Así es. Por ejemplo, en el circuito americano es más fácil desplazarse, porque nos movemos dentro del mismo país. Los viajes son más fáciles y hay menos tiempo perdido. Con esta situación, han concentrado los primeros torneos en el mismo país para evitar viajes y luego habrá que ver cómo transcurre el tema del coronavirus y qué medidas se toman en ciertos países. Ya se han cancelado torneos porque a algunos países no lo permiten o porque a los patrocinadores no les interesa jugar a puerta cerrada. Habrá más torneos que se cancelen de aquí a final de año. Con respecto a estos seis, el circuito europeo está hablando con el gobierno británico para intentar que los deportistas no tengan que estar quince días de cuarentena, pero por ahora nos han dicho que no cojamos vuelos ni reservemos nada, ya que el tema no está seguro.

¿Cómo se plantea viajar por el mundo en esta situación tan extraordinaria?

—Obviamente, lo peor de mi trabajo son los viajes, el tiempo perdido en los aeropuertos. Pero es parte de ello y a mí me encanta lo que hago. Me siento un privilegiado por hacer lo que me gusta. Los próximos meses vamos a jugar en Europa y se escucha que habrá torneos en Portugal y Alemania. Supongo que a esas citas iré en coche. Me gusta hacer viajes en automóvil y mientras se pueda hacer así, lo haré, ya que Eurolan me ha dejado un Land Rover Discovery Sport para que pueda hacerlos más cómodo. A Inglaterra me parece más complicado ir en coche, pero tampoco lo descarto.

Serán muchas horas de carretera entonces.

—Bueno, es sobre todo a la hora de ir. Los primeros torneos son en Inglaterra y en Gales, por lo que no creo que haya más de cuatro horas entre un lugar y otro. Al final, es cómodo coger el coche y poder ir al siguiente torneo sin tener que ir al aeropuerto y esperar la hora del avión. Si voy en coche, iré con mi aita y conduciremos entre los dos. Estamos acostumbrados, porque hemos hecho muchos viajes años atrás. Los viajes a Portugal y Alemania se pueden hacer sin problema. Se tarda un día pero puedes parar cuando quieras y te tomas el viaje de otra manera.

Lo que parece más seguro es que tendrán que jugar sin público. ¿Qué opina sobre ello?

—El golf no es como en otros deportes, donde el público juega un papel más importante y jugar fuera de casa o en casa muchas veces puede decidir algún partido. A mí, como jugador, me gusta jugar con cuanta más gente mejor, que haya más ambiente, pero tampoco me parece que sea un tema tan decisivo. Incluso, puede haber algo positivo de cara a que la gente vea más golf por la televisión y al final ayude a que más personas se enganchen. A nosotros nos gusta jugar con público, pero entiendo que ahora mismo no puede ser y no sé si de aquí a final de año jugaremos algún torneo con gente.

¿Qué objetivos se marca ante este nuevo panorama en el European Tour?

—Ahora, en estos primeros torneos, quiero coger rodaje, ver con qué sensaciones llego. Estoy entrenando bien, pero, después de un parón tan grande, existe cierta incertidumbre. Sí que es verdad que los primeros torneos del año no me dio tiempo a jugar mucho, pero estaba con buenas sensaciones y pegándole a la bola bastante bien. Aunque no terminaban de llegar los resultados. Ahora, quiero seguir subiendo en el ranking e intentar terminar lo más arriba posible para meterme en los últimos torneos de la Rolex Series y en la final de Dubai. Luego, obviamente, continuar ascendiendo para poder jugar los cuatro grandes el año que viene.

"A nosotros nos gusta jugar los torneos con público, que haya más ambiente, pero entiendo que ahora mismo no puede ser"

"Quiero coger rodaje y sensaciones; estoy entrenando bien, pero tras un parón tan grande existe cierta incertidumbre"