El Gobierno vasco no tiene intención de rebajar las condiciones que impuso para que haya público en San Mamés durante la Eurocopa, que se disputará a partir del 11 de junio, según confirmó ayer lunes el lehendakari, Iñigo Urkullu.

En una entrevista en Radio Euskadi, el lehendakari reiteró que su deseo es que la Eurocopa se juegue en San Mamés, pero antepondrá los consejos de las autoridades sanitarias y "no se rebajarán los criterios marcados" por el propio Gobierno vasco para permitir público.

Entre estos criterios están la exigencia de tener un 60% de la población vacunada en la CAV y resto del Estado español antes del 14 de junio, o una cifra que no supere el 2% de las camas de las UCIS ocupadas por covid para la fecha de los partidos, unos objetivos que la Federación Española de Fútbol considera "imposibles de cumplir y desembocarán, por tanto, en la ausencia de público".

En esta situación, la UEFA decidirá el próximo lunes 19 de abril si mantiene la sede de Bilbao, al igual que otras tres ciudades a las que ha pedido más información.

El lehendakari cree que la polémica sobre la presencia de público o no en el campo es "interesada políticamente", y así lo interpretó ayer lunes el presidente del PP vasco, Carlos Iturgaiz, en una intervención telemática en el Fórum Europa-Tribuna Euskadi. "Algunos intentan políticamente que Bilbao quede fuera de juego de la Eurocopa", dijo el líder popular en referencia al Gobierno Vasco, a quien ve "incómodo" con la posibilidad de que San Mamés acoja el evento.

¿Sevilla como alternativa?

Aunque la decisión de retirar la sede de la Eurocopa a Bilbao no depende de la RFEF, su presidente, Luis Rubiales, hace días que maneja una alternativa ante la eventualidad de que el Estado español se quede si plaza. En caso de que la UEFA no de su plácet a Bilbao al no ver garantías plenas, Sevilla y Madrid se han ofrecido como recambio.

La RFEF mantiene con la Junta de Andalucía un acuerdo para reactivar el estadio de La Cartuja, sede de las dos últimas finales Copa y de la Supercopa reciente. Además, el pasado diciembre ambos entes suscribieron un acuerdo por el cual las selecciones españolas absolutas masculina y femenina y la sub-21 jugarán dos partidos anuales en distintos campos de fútbol andaluces.

Ocho sedes confirmadas

De momento, la UEFA tiene confirmadas ocho de las doce ciudades que iban a acoger la Eurocopa. San Petersburgo comunicó un aforo del 50% con la posibilidad de aumentar esta capacidad, mientras que Budapest pretende llenar el estadio, siempre que los aficionados cumplan los protocolos. Bakú ha confirmado un aforo del 50%, aunque los seguidores de los países participantes deberán presentar un resultado negativo en la prueba de covid-19 para entrar en Azerbaiyán.

Ámsterdam, Bucarest, Copenhague y Glasgow anuncian que dispondrán de un aforo del 25% al 33%, y Londres del 25%, como mínimo, para los tres partidos de la fase de grupos y el partido de octavos de final. A principios de junio, espera confirmar más capacidad para las semifinales y la final, el 11 de julio.

Las cuatro ciudades restantes, Múnich, Roma, Bilbao y Dublín, tienen hasta el 19 de abril para proporcionar información adicional sobre sus planes. En esa fecha se tomarán las decisiones finales sobre la celebración, o no, de los partidos en esas sedes que aún están en duda.