Aterrizó la final a ocho de la Champions League femenina en un vacío San Mamés por culpa de la pandemia del coronavirus y lo hizo con un cruce de cuartos de final a partido único que no defraudó en emoción. El Barcelona, con más de cuarenta entrenamientos en las piernas en las seis últimas semanas y el Atlético, con cinco pilares fuera de combate contagiadas con covid-19 -Silvia Meseguer, Deyna Castellanos, Charlyn Corral, Laia Aleixandri y Leicy Santos- y solo cuatro días de preparación tras cumplir la totalidad de la plantilla una cuarentena de diez días, midieron sus desiguales fuerzas con el reto de alcanzar unas semifinales para las cuales logró sellar su preciado pasaporte el conjunto blaugrana. Las jugadoras de Lluís Cortés, con el objetivo de repetir presencia en una final en la que cayeron goleadas a manos del Olympique de Lyon el pasado curso (4-1), se impusieron por la mínima a las colchoneras con gol de la francesa Kheira Hamraoui en un choque de carácter histórico por ser el primero entre dos equipos pertenecientes a la Primera Iberdrola en la máxima competición continental a nivel de clubes.

Las vigentes campeonas de liga y Supercopa cumplieron así su condición de favoritas en una atractiva cita que se desarrolló en medio de un singular silencio en La Catedral, despojada del calor de la gente por imperativo sanitario en una tarde de máxima trascendencia futbolística que cabalgó a lomos de la superioridad física exhibida por el Barça. Tomaron desde el pitido inicial la iniciativa las catalanas ante un Atlético que, eso sí, disfrutó de la primera ocasión del encuentro a los nueve minutos. Desarbolaron las de Dani González a las culés con una internada por banda derecha de Turid Knaak y un venenoso centro al área de la alemana que no supo embocar en el segundo palo Kylie Strom.

Perdonó con un remate desviado la estadounidense, cuya manifiesta oportunidad para golpear primero abrió las hostilidades en un pleito que avanzó con dominio de balón y acercamientos sin excesivo peligro del Barça mientras el Atlético, a la espera, aguardaba cualquier mínima opción para contragolpear. Lo hicieron de nuevo las madrileñas en el minuto 25, sin premio, tras un error en la medular de Alexia Putellas, quien probó fortuna desde la larga distancia poco después sin incomodar a la guardameta Hedvig Lindahl. Sí lo hizo la capitana blaugrana, y de qué manera, a la media hora de juego, cuando la francesa Aissatou Tounkara tuvo que salvar bajo palos un remate con marchamo de gol con el que la 11 del Barça a punto estuvo de poner el 0-1 en el marcador.

Con tablas en el luminoso y una posesión de balón del 68% para las blaugranas, las veintidós protagonistas tomaron el camino hacia vestuarios para encarar con energías renovadas una segunda mitad en la que Hamraoui fue la primera en intentarlo para el Barcelona con un flojo disparo desde la frontal del área que se marchó arriba. Las espadas seguían en todo lo alto y la delantera Asisat Oshoala cerca estuvo de cabecear en boca de gol para adelantar a las de Cortés, pero volvió a salvarse la zaga colchonera, cada vez más hundida en su área. Lo aprovecharon las ayer vestidas de amarillo para ganar presencia en las inmediaciones de Lindahl, que vio cómo Oshoala, libre de marca esta vez, perdonaba con todo a favor al no encontrar portería con un chut que salió desviado.

Premio al asedio

Con una hora de juego en las piernas, sensiblemente fatigadas en el bando colchonero, intentó responder tímidamente Knaak, pero no sobresaltó a un Barça cada vez más punzante y que tuvo la enésima ocasión de marcar tras un centro pasado de Marta Torrejón que no alcanzó a conectar Oshoala en primera instancia, pero sí Putellas, quien remató contra el lateral de la red tres minutos antes de que Graham-Hensen, en el setenta de juego, se topara con el guante izquierdo de Lindahl en un vis a vis con la portera sueca.

Se barruntaba el gol culé y llegó finalmente, tras un fallido intento de chilena de Oshoala, en el minuto 80. Cazó el rechace Hamraoui dentro del área y, sin pensárselo dos veces, envió el esférico al fondo de las redes colchoneras para acabar con la resistencia del Atlético y meter al Barcelona en unas semifinales en la que se medirá el martes en Anoeta al Wolfsburgo alemán, que goleó 1-9 al Glasgow City.

ATLÉTICO: Lindahl; Guagni, Tounkara, Van Dongen, Menayo (Min. 73, Laurent), Strom, Sampedro, Moore, Knaak (Min. 87, Marcos), Sosa (Min. 87, Chidiac) y Duggan.

BARCELONA: Paños; Torrejón, Pereira, María León, Ouahabi, Hamraoui, Putellas (Min. 90, Losada), Mertens (Min. 63, Caldentey), Graham Hansen, Hermoso y Oshoala (Min. 82, Bonmati).

Gol: 0-1: Min. 80, Hamraoui.

Árbitro: Stéphanie Frappart (Francia). Amonestó a la colchonera Guagni (Min. 23).

Incidencias: Partido correspondiente a los cuartos de final de la Women’s Champions League disputado en San Mamés con las puertas cerradas al público. Se guardó un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas del coronavirus y las jugadoras de los dos equipos posaron con una camiseta en apoyo a la centrocampista colchonera Virginia Torrecilla, quien se recupera en su domicilio tras ser operada en mayo de un tumor cerebral.