LEGANÉS: Cuéllar; Rosales, Bustinza, Omeruo (Awaziem, min. 5), Jonathan Silva; Recio (Rubén Pérez, m.54), Amadou, Roque Mesa (Assalé, min. 54); Bryan Gil (Manu Garrido, min. 79), Avilés (Ruibal, min. 54) y Guerrero.

SEVILLA: Vaclik; Jesús Navas (Sergi Gómez, min. 87), Koundé, Diego Carlos, Reguilón; Oliver Torres (Munir, min. 71), Gudelj, Jordán (Fernando, min. 71); Ocampos, Suso (Banega, min. 51) y En-Nesyri (De Jong, min. 87).

Goles: 0-1: Min. 23; Óliver Torres. 0-2: Min. 35; Óliver Torres. 0-3: Min. 81; Munir.

Árbitro: Soto Grado (Comité riojano). Amonestó a Amadou, Roque Mesa, Koundé, Gudelj, Jordán, Ocampos y Manu Garrido.

Incidencias: Estadio Butarque, sin público.

- Dos goles de Óliver Torres en la primera mitad y otro de Munir en el tramo final sirvieron para sellar un triunfo que permite al Sevilla romper una racha de cuatro empates consecutivos y acerca al Leganés aún más al abismo de Segunda.

Incapaces de ganar desde el parón competitivo provocado por la crisis sanitaria del coronavirus y cada vez en una situación más comprometida, a los locales no les quedaba más remedio que pelear con sus escasas armas ofensivas para conseguir los tres puntos.

Guido Carrillo y Óscar Rodríguez lesionados, la apuesta fue situar arriba a Miguel Ángel Guerrero, Javier Avilés y Bryan Gil. Este último fue titular en los blanquiazules al igual que Roque Mesa e Ibrahim Amadou, todos ellos cedidos por los sevillistas.

Dadas las circunstancias a los madrileños les costó soltarse en ataque hasta que Roque Mesa probó suerte con dos disparos desde fuera del área, uno atrapado por Vaclik en dos tiempos y otro que se marchó por encima del larguero. A esos intentos le siguió otro momento de intensidad ofensiva andaluza. Este trajo consigo el primero de los goles cuando Óliver Torres capturó en la frontal un despeje de cabeza tras córner y encontró red al pasar el balón por una nube de piernas.

Óliver en el minuto 35 dio lustre con calma a un pase de Navas filtrado para poner el segundo.

El Leganés, casi noqueado, trató de levantarse antes del descanso con un poco de ímpetu. De vuelta el técnico Javier Aguirre le dio apenas diez minutos de tregua al planteamiento inicial antes de revolucionarlo con tres cambios.

No se vio sin embargo sorprendido el contrario, bien plantado en el césped y confiado en hacer daño en alguna contra gracias a la rapidez de Ocampos y a la profundidad de En-Nesyri. Los visitantes perforar aún más la herida cuando Munir controló al borde del área un despeje y definir con elegancia para asentar a los suyos en puestos Champions ante un Leganés encaminado hacia un triste destino.