TIGNES. "Es increíble, soy líder del Tour de Francia, no me lo creo, espero no despertar mañana y que se trate de un sueño. Ahora a darlo todo, si me quitan este maillot amarillo lo van a tener que sufrir mucho".

La primera experiencia de amarillo será inolvidable para Bernal, una situación que le llegó a ruborizar.

"Casi lloro, me daba hasta vergüenza, estaba ahí arriba y vi a mi papá mi novia enfrente, los dos llorando. Fue emocionante, esto es el Tour de Francia. Luego cuando vi el león también fue muy especial, tengo los recuerdos de cuando ganaba Alberto Contador".

El líder del Ineos admitió que a sus 22 años no esperaba vestirse de amarillo en el Tour de Francia.

"No lo esperaba, la verdad. Esas cosas se imaginan, pero no lo llegas a creer realmente. Sinceramente, no lo esperaba".

A falta de una etapa de competición en los Alpes y el paseo de París, el ciclista colombiano no quiere cantar victoria, prefiere la prudencia.

"Mañana voy a hacerlo lo mejor posible, todavía no he ganado y vamos a pasar un gran test. Será una etapa muy dura, el equipo va a ayudarme a defender el maillot amarillo y hay que concentrarse en defender el liderato"

Bernal tendrá a su servicio a su compañero Geraint Thomas, nada menos que el actual ganador del Tour.

"Thomas se entregará por mi, su apoyo es muy importante. Lo vamos a dar todos para que el triunfo se quede en el equipo Ineos".

El líder dejó claro ante la etapa de este sábado con final en Val Thorens que la táctica del equipo "más defensiva que atacante porque estamos en una buena posición, tenemos un buen equipo y tendremos qué ver qué pasa en carrera".

El nuevo líder se decidió a atacar en el Iseran como una apuesta ambiciosa por el "todo o nada", y la moneda le salió de cara.

La decisión era difícil. Si me quedo a la defensiva tal vez puedo perder el podio, si arriesgo y ataco puede salir bien y conseguir el objetivo. Si hubiera reventado tampoco pasaría nada, soy joven, puedo aprender y tengo muchos años por delante. Me sentía bien y lo intenté".

Si Bernal acaba ganando este Tour de Francia, será el más joven del Tour en los tiempos modernos, dato que el colombiano gestiona con prudencia.

"No se si sería una nueva era, lo que quiero es seguir disfrutando del ciclismo, amo correr en bicicleta, competir, sentir la adrenalina de la carrera. No pienso en el futuro, solo quiero disfrutar de lo que me gusta".

Sobre la suspensión de la etapa mientras descendía el Col de Iseran, Bernal señaló que no quería parar, mientras le comunicaban que era líder.

"No sé qué pasó, iba a tope, atacaba, todo iba bien y me dijeron que me parara, pero no quería. Luego me comunicaron que la carrera se había acabado, no sabía qué pasaba. Después supe que era el líder, y no podía creerlo, y todavía ahora no puedo creerlo".

"No se podía continuar en esas condiciones, era el mejor lugar para parar a los corredores, pero en el momento nos ha parecido extraño. lo que cuenta es que ahora tengo el maillot amarillo y es un sueño".