Donde tendría que haber ilusión desbordada por participar otro año en una de las citas señaladas de cada temporada, en el Lointek Gernika Bizkaia todo son incertidumbres y resignación después de que el covid-19 se haya cebado con la plantilla cuando llegaba la parte más interesante de un curso en el que el equipo de Mario López estaba marcando una trayectoria ascendente. Sin jugar desde el 14 de febrero, ahora toca empezar de cero, o desde menos aún, porque el virus ha dejado muy tocada la condición física de la plantilla. Desde hace 20 días, el Lointek Gernika no entrena en grupo porque ocho jugadoras han pasado la enfermedad y aún arrastran secuelas de más o menos importancia.

El lunes el técnico programó un entrenamiento exigente con solo ocho jugadoras disponibles para comprobar "sin llegar al límite" el estado general y dedujo que "no estamos ni al 40%, si llegamos. Eso las que han entrenado. Las que no lo han hecho, ni eso". Tres jugadoras, Belén Arrojo, Nogaye Lo y Nadia Colhado, aún seguían confinadas ayer, aunque las pruebas realizadas el lunes dieron negativo para todas los integrantes del equipo, excepto una que dio resultado no concluyente, por lo que tendrá que confirmarse el negativo antes de que la persona afectada pueda incorporarse a la expedición, viajar a primera hora de este martes a Valencia y meterse en la burbuja de la Copa junto al Avenida, el Girona, el Valencia, el IDK Euskotren, el Estudiantes, el Ensino Lugo y el Tenerife, rival del conjunto foral en cuartos de final.

Así, en precario, toca afrontar ese duelo, el primero de una serie de al menos nueve encuentros que las gernikarras deben jugar en 22 días, con tres viajes largos incluidos, dos a Canarias y uno a Rumanía. Así, la planificación resulta inexistente. "Tenemos que pensar en el día a día y ver cómo evolucionan las jugadoras, pero las sensaciones a día de hoy no son nada buenas", reconoció el técnico del Lointek Gernika, cuya máxima preocupación es "no reventar al equipo en un momento en el que, además, el riesgo de lesión es muy alto". Por tanto, no puede haber objetivos para un grupo muy tocado, "aunque si vamos a la Copa será para competir al máximo que podamos, como siempre. Habría sido mejor quedarse aquí e ir mejorando la puesta a punto de las jugadoras, pero no vamos a renunciar a nada de antemano".

dosificar y controlar

El conjunto vizcaino se va a encontrar con un rival, obviamente, "con mucho más ritmo y por eso habrá que eludir el cuerpo a cuerpo, utilizar distintas variantes tácticas para dosificar los esfuerzos, controlar los minutos de las jugadoras y tratar de llegar lo más frescas posibles a los momentos claves del partido". Mario López confió en que su plantilla pueda ir "mejorando con el paso de los entrenamientos, con más calidad que cantidad en las sesiones" y, pese a los veinte días sin entrenar, "el trabajo táctico ya está hecho, esos automatismos no se pierden y lo que me preocupa es que podamos alcanzar el ritmo de competición que teníamos antes del parón".

Ante la adversidad, no queda otra receta que "estar más unidas que nunca, estar en comunicación constante las jugadoras con los técnicos y el cuerpo médico para conocer en todo momento sus sensaciones. En definitiva, tener la máxima calidad en todo lo que hagamos". El vestuario del Lointek Gernika ha sido una balsa de aceite toda la temporada Otro factor aparece como fundamental en este periodo crítico y es no caer en la frustración. "Vamos a hablar con las jugadoras del aspecto mental, de aunar fuerzas, de hacer muy bien cada cosa que planteemos. Estoy seguro de que cada una de las jugadoras va a dar un paso adelante con lo que tenga", apuntó Mario López.

Itzi Ariztimuño, por su parte, aseguró en el encuentro con los medios en Maloste para presentar la Copa que "después de todo lo que ha pasado, tenemos muchas ganas de jugar, pero sabemos que todo va a ser muy distinto a otros años. Aunque la experiencia siempre es bonita". La base bilbaina destacó "el buen ambiente que tenemos dentro y fuera de la cancha y eso seguro que nos va a ayudar a superar esto. Creo que podemos dar un susto. Estamos con confianza, pero tampoco nos volvemos locas porque sabemos cómo están las cosas". Ariztimuño comentó respecto al Tenerife, al que el Lointek Gernika ya se ha enfrentado dos veces esta campaña, que "es un equipo difícil de jugar, con mucha experiencia y jugadoras buenas en el uno contra uno".

El presidente Gerardo Candina apuntó también a la incertidumbre que vive el club después de "un largo confinamiento", que ha roto "la buenísima dinámica" que llevaba el equipo "en un momento delicado" de una temporada en la que el virus había estado bajo control. "Pero no queda otra que afrontarlo con entereza y con la unión de vestuario vamos a intentar competir en Valencia", aseguró.

"Tenemos ganas de jugar la Copa y estamos con confianza, pero no nos volvemos locas"

Jugadora del Lointek Gernika Bizkaia

"Estoy seguro de que cada jugadora va a dar un paso adelante con lo que tenga"

Entrenadior del Lointek Gernika Bizkaia