La Fiscalía de Roma ha solicitado la imputación del expresidente del Juventus Turín Andrea Agnelli y del exjugador Pavel Nedved, entre otros directivos del club italiano, en el marco de una investigación por `presunto fraude fiscal o falsedad de cuentas y la generación de plusvalías en varias transacciones de futbolistas con otros clubes.

Agnelli y Nedved, junto a otras diez personas, como los directivos Maurizio Arrivabene y Fabio Paratici, son sospechosos de amañar el mercado, obstrucción a la supervisión y facturación falsa, según los medios locales.

Las peticiones de enjuiciamiento para los diez acusados se enmarcan en la llamada investigación 'Prisma', iniciada por la Fiscalía de Turín (norte) y, en particular, según el acta de acusación, se alegan plusvalías ficticias sobre los salarios de los jugadores durante la pandemia de covid-19.

La transmisión de la investigación a Roma produjo después de que en septiembre pasado el Tribunal Supremo declarara la incompetencia territorial de Turín, ordenando la transmisión de los hechos a los fiscales romanos del grupo, coordinados por el fiscal adjunto Giuseppe Cascini.

Bajo el nombre de 'Investigación Prisma', las autoridades indagan dos movimientos diferentes del Juventus a lo largo de varios años, que se distinguen entre un posible fraude fiscal o falsedad de cuentas en los ejercicios económicos de 2020 y 2021, y la supuesta generación de plusvalías en varias transacciones con otros clubes.

Por ese último movimiento, el de las plusvalías, el Juventus fue sancionado con 15 puntos menos en la pasada temporada de Liga, aunque la sanción fue anulada después de que el Colegio de Garantías del Comité Olímpico Italiano (CONI) acogiese favorablemente el recurso del club.

La entonces cúpula directiva del Juventus, con Agnelli a la cabeza, dimitió en bloque en noviembre de 2022 por las investigaciones de la Fiscalía, lo que generó un terremoto en todo el país.