A pandemia del coronavirus covid-19 impactó en el mentón de todas las modalidades deportivas como un martillo neumático. Anestesiante. Así, en el boxeo, una especialidad en la que tiene una incidencia muy importante tanto el trabajo físico como técnico, el parón provocado por el estado de alarma proclamado por las autoridades sanitarias españolas conduce a un escenario complicado, ya que la actividad, aún sin fecha de reinicio, apunta a restañarse de un momento a otro y los deportistas necesitan reincorporarse cuanto antes al rendimiento que exige el ensogado con la enorme dificultad que ello conlleva. La crisis también ha trastocado el calendario: los Estatales amateur de 2020 se han aplazado directamente a diciembre, cuando lo ideal es que se desarrollaran antes del meollo veraniego, y las veladas profesionales están en suspenso ante la incertidumbre en varias cuestiones, especialmente instaladas en si la celebración de próximos compromisos se podrán celebrar con público o no.

En este escenario crítico, Txerra Dehesa, entrenador del club MTB Boxing de Sestao, ha ideado una herramienta nueva para continuar con el trabajo que se había "frenado en seco" en "plena temporada". Anclado en las facilidades que ofrecen tanto la tecnología como las redes sociales, adapta los recursos que se pueden tener en cada hogar para adoctrinar en boxeo una hora al día en la plataforma Zoom con la esperanza puesta en "combatir el sedentarismo obligatorio" generado por el covid-19. "Un palo de escoba, una cuerda o una garrafa de cinco litros sirven para realizar algunos ejercicios. Solo hay que utilizarlos con ingenio y conocimientos", afirma el preparador, que inició su labor la semana pasada.

Con todo, el técnico de Ezkerraldea se felicita por la "aceptación" que está teniendo la innovadora idea, que tiene entre sus pilares fundamentales que se pueda amoldar a todos los niveles, incluidos neófitos en el cuadrilátero. De hecho, aunque la mayoría de los practicantes forma parte de la cultura del ensogado, el efecto llamada está acercando a deportistas relacionados con disciplinas como el crossfit. "Además, contamos con alumnos de Palma de Mallorca, Madrid o Donostia", concreta Dehesa, que ofrece más información a través del número de teléfono 605 715 744.

El "dinamismo", no obstante, forma parte de la columna vertebral del plan del entrenador, quien articula su trabajo delante de la pantalla del ordenador entre "ejercicios de fuerza y de trabajo aeróbico" para aunar exigencia y diversión en un buen cóctel. "Ejercitamos la coordinación, la preparación física, hacemos sombra...", reseña el santurtziarra. Las sesiones se llevan a cabo de lunes a viernes, a partir de las 18.30 horas, con el objetivo de dar tiempo a todo el mundo a "dar el homenaje que merecen todos los sanitarios a las 20.00".

Para el preparador, en cualquier caso, no supone solamente una preparación "física", ya que considera el deporte como una buena salida para encauzar los problemas derivados del confinamiento, muchos de ellos relacionados con la salud psicológica y anímica. "Es fundamental, sin duda, para sentirse mejor con uno mismo. Esta pandemia ha dejado claro que somos deportistas y que la rutina también era uno de los pilares de nuestra vida. Tenemos contacto con los practicantes de boxeo del club y vemos que se ha generado cierta ansiedad en ellos, que deriva en sedentarismo y cierta depresión", admite el preparador de Ezkerraldea, quien apostilla que "en nuestras sesiones dejamos abiertos los micrófonos antes y después de la sesión, para que funcione también como método para socializar y hablar entre nosotros". Al final, determina Dehesa, la "amistad" es un aliciente muy potente a la hora de dinamizar las clases de boxeo online, aunque los componentes de MT Boxing contaban con hojas de ruta personalizadas para el tiempo de barbecho.

"Hasta ahora, todos lo entrenamientos que había hecho habían sido presenciales, así que se me hizo raro comenzar a entrenar delante de la cámara", explica el entrenador del club de Sestao. Al principio fue "complicado", pero Dehesa se ha acomodado a las circunstancias. "Utilizo dos herramientas: una cámara que me graba para que los alumnos me vean en directo y una pantalla de ordenador en la que puedo ver a cada uno de ellos y hacer correcciones de forma individual", cuenta el santurtziarra. Por ahora, en semana y media de entrenamientos, cada sesión está contando con unos treinta alumnos de media. Suma y sigue.

Txerra Dehesa ha puesto en marcha una herramienta para continuar con el trabajo que se había "frenado en seco" por el coronavirus

El preparador de Santurtzi cuenta con una treintena de alumnos por clase, algunos de ellos de fuera de Euskadi, gracias a la tecnología