Bilbao - Kerman Lejarraga, Jon Fernández, Andoni Gago, Violeta González... son nombres que engordan el camino del boxeo vizcaino en el panorama mundial. Son mojones en la autopista del profesionalismo en el ring, en el que se marca el éxito de Bizkaia en el mundo pugilístico. Juan Luis González, presidente de la Federación de Bizkaia de boxeo, relata que “si hay un ídolo, la gente se mueve”. Es la senda. Todos quieren llegar arriba. Los referentes ponen el GPS de los aficionados en marcha. “La suerte que tenemos es que actualmente no hay uno solo, hay varios”, certifica el federativo. A juicio del barakaldarra, “aparece todo de golpe, de repente, y nadie se lo podía esperar”. “La afición de Bilbao siempre ha estado ahí. En los años cincuenta se organizaban combates en gabarras por la Ría. Hemos vivido buenos momentos en La Casilla. Ahora, también tenemos el frontón Bizkaia y el Bilbao Arena”, asevera. El presidente, en la fiebre de Bilbao por los cuadriláteros, pone también el acento en “los promotores”. “Ellos son los que arriesgan el dinero y apuestan por los deportistas. Afortunadamente, eso también lo tenemos. Ha coincidido todo a la vez. Se lo tenemos que agradecer. Hay mucho trabajo detrás: clubes que trabajan, púgiles que se esfuerzan y buenas promotoras”, afirma González, que se encuentra en la entidad desde el curso pasado.
Si bien los competidores forman parte de una nueva generación “dorada” -hay diez profesionales, entre ellos una mujer, la primera de Euskadi-, Bilbao se ha convertido en la punta de lanza de las carteleras en el Estado. El pasado noviembre, Master Series consiguió meter 10.000 personas en el Bilbao Arena y MGZ espera lo mismo con el cinturón EBU de Lejarraga ante Skeete, cuya venta de entradas va viento en popa.
De este modo, dos promotoras ya se han puesto en contacto con la Vizcaina “de manera seria”, mostrando un gran interés en recalar en la villa. La primera empresa en preguntar sobre la idoneidad de la ciudad tiene sede en Valencia y su ámbito de trabajo se centra específicamente en K1, aunque no descartarían añadir combates de boxeo en la cartelera. Las negociaciones se encuentran avanzadas. La segunda organización pendiente de Bilbao es de Austria. Hace dos semanas se acercó un representante de la empresa y analizó que se trata de una ciudad que, por instalaciones y cantidad de público, resulta interesante para sus intereses. Ambos consultaron con el ente para ver las necesidades que tendrían programaciones de alto nivel. “Esperamos que vengan con su espectáculo. Bienvenido sea. Los eventos que mueven miles de personas suponen dinero para la ciudad”, define González.
“Bilbao es la ciudad referente a nivel Estatal. Eso es seguro. La gente de boxeo de otras comunidades se queda impresionada por haber llegado a meter a 10.000 personas en una velada. Tenemos grandes ídolos, que ayudan a ello”, recita el presidente, quien coloca un nombre en el Olimpo: Andoni Gago. “Empezó todo con él. Es un gran luchador. Ha hecho cosas encima del ring que otros solo pueden soñar. No hay que olvidar que nos referimos a profesionales pero que en contadas ocasiones pueden vivir del cuadrilátero. Hacen un trabajo increíble. Después de él, llegó el resto”, concreta González.
NO MORIR DE ÉXITO “Ahora oyes hablar de boxeo en la calle, de nuestros chavales. Estamos encantados. Tenemos que gestionarlo bien para no morir de éxito”, verbaliza el federativo de Barakaldo. Las grandes citas profesionales, así como la buena respuesta de las promociones pequeñas, auguran un gran futuro. “Lo más difícil es gestionarlo, para que se mantenga en el tiempo. La federación ahí tiene un papel secundario. Nosotros no arriesgamos dinero ni ponemos las manoplas al boxeador, pero sí que tratamos de que toda la documentación y el equipo humano se pueda poner en marcha. Supervisamos el trabajo que hacen los demás. Estaría encantado que los campeones puedan llevarse un Mundial, porque ese trabajo abrirá más opciones”, afirma González.
En cualquier caso, a su juicio, la receta para continuar siendo la referencia es “ser honestos con lo que se hace”. “Hay que continuar con lo que se viene construyendo. Hay que traer combates y espectáculos de calidad y ser estrictos con las normas a cumplir. El espectáculo tiene que ser profesional. Por supuesto, te puedes equivocar y puede haber fallos. Pero, si das calidad, el público va a responder”, remacha.