Javier Guillén: “La etapa de Oiz es lo mejor que podemos ofrecer en ciclismo”
Unas gafas con montura de una marca muy ciclista enmarcan a Javier Guillén, director general de la Vuelta, que reflexiona sobre la etapa vizcaina de la prueba
bilbao - Sentado sobre una de las butacas negras situadas en la biblioteca foral, tras haber presentado junto a Unai Rementeria, diputado general de Bizkaia, e Imanol Landa, alcalde de Getxo, la etapa de la Vuelta a España que atravesará Bizkaia el próximo 12 de septiembre, Javier Guillén, director general de la carrera, aporta a DEIA su visión sobre lo que supone la apuesta de la Vuelta por Bizkaia.
Durante la presentación de la Vuelta comentó que la etapa con final en el monte Oiz es la más bonita.
-Para mí todas las etapas de la Vuelta son bonitas, pero he de reconocer que esta es especialmente atractiva. Conjuga mar, costa y montaña. Estéticamente, lo tiene todo. Me parece que es lo mejor que podemos ofrecer en ciclismo. Luego tiene un elemento fundamental, que es el público. No solo hay un público entendido sino que hay un público masivo. Nosotros necesitamos estar cerca de la gente. Además, deportivamente hemos sido capaces de en 166 kilómetros concitar todo un espectáculo. Es una etapa con seis puertos que hacen mella, pero no son son seis puertos mortales, hasta el final. El final me gusta porque es un final muy de la Vuelta. Es un descubrimiento y tiene unos últimos cinco kilómetros muy duros. Teniendo en cuenta que será la tercera semana de carrera y que por lo tanto habrá cansancio entre los corredores, este perfil hará que sea una etapa absolutamente impredecible. Aquí se van a jugar muchas opciones.
¿Esta etapa rinde un homenaje a la afición vasca al ciclismo?
-La afición vasca se merece todos los homenajes que le podamos hacer. Estoy especialmente contento porque esta es una etapa eminentemente vasca, eminentemente vizcaina. Sale de Getxo, termina en el Balcón de Bizkaia y transcurre en territorio vizcaino. Nosotros tenemos que estar cerca de la afición vasca y sirva esto como un homenaje. Es bueno que vengamos y tenemos que seguir viniendo. Estamos especialmente contentos de venir. El mejor homenaje que podemos hacer es seguir insistiendo.
¿Cómo dieron con el monte Oiz?
-Aquí el mérito hay dárselo a quien lo tiene, en este caso, la Diputación Foral de Bizkaia. Ellos nos hicieron un doble planteamiento: queremos una etapa de la Vuelta, pero queremos una etapa que tenga mucha sustancia y queremos poner algo en valor, un puerto duro. Entonces nos pusimos a trabajar sobre esa idea. La Diputación quería alimentar muy bien el territorio. Quería una etapa para todos los vizcainos dentro de la limitación que te puede imponer el kilometraje y teniendo como referencia acabar en el Balcón de Bizkaia, empezamos a trabajar. Los ajustes que hicimos sobre la etapa fueron pocos porque la propuesta era magnífica.
¿Existe un nombre, un ideólogo, que pusiera sobre la mesa este final?
-Me lo dijo el diputado, Unai Rementeria. Pero él tiene buenos asesores. Quién se lo dijera a ellos no lo sé, pero fueron ellos los que lo dijeron a mí.
¿Cuál fue el protocolo que siguieron para hacer realidad esta etapa, una llegada inusual?
-Lo más importante es que se pueda instalar la meta. Hay dos cuestiones: instalar la meta, tanto por cuestiones de televisión y por el lado por los corredores. Lo siguiente es que sea una zona transitable. No vale subir a cualquier sitio, aunque no tiene que ser necesariamente un asfaltado magnífico. Yo creo que las carreteras a la antigua usanza invitan mucho más a la épica. Nos retrotraen a unos tiempos de los que venimos y a los que hay que seguir homenajeando. Luego está el tema de encajar la etapa en sí. Esta etapa se empezó a trabajar hace mucho tiempo. La teníamos muy centrada en el calendario.
¿Cuál es el coste de una etapa de estas características?
-Ahora mismo estamos ajustando las últimas cifras con la Diputación. Las etapas de la Vuelta, más o menos, siguen un canon estándar. Con la llegada y la salida estamos hablando de unos 130.000 euros. La llegada solo, se suele ir a los 90.000 o 100.000 euros y las salidas cuestan unos 40.000 euros. No le puedo dar la cifra definitiva porque estaría traicionando la confidencialidad con la Diputación Foral. También le digo una cosa: creo que es una gran inversión por el retorno publicitario, por el retorno de satisfacción al público y por el retorno directo que deja la Vuelta con más de 3.000 personas en una noche en Bizkaia, lo que supone unos 300.00 euros. Es una gran inversión.
El final de Oiz, tan duro, y otras subidas, en las que los corredores apenas avanzan son muy cuestionadas por parte de la afición. Dicen que no es ciclismo. ¿Cuál es su opinión?
En este caso tengo que ir de lo general a lo particular. Mi opinión es que no estoy de acuerdo. El director de la Vuelta nunca hace la carrera que él quiere. Tiene que intentar hacer la Vuelta que capte la mayor cantidad de público posible, siempre respetando los estándares ciclistas. Nosotros partimos de la base que estos recursos funcionan porque la gente se suma a ellos. Tenemos que seguir encontrando esos recursos épicos. El ciclismo es un deporte duro. Si vamos a lo particular, el monte Oiz no entra dentro de esa categoría. Este es un puerto de montaña muy ciclista, un puerto largo, de ocho kilómetros. Es verdad que tiene rampas muy duras y el porcentaje medio es bastante alto, pero esto no entraría en la categoría de los repechos explosivos. Este es un puerto duro como puede ser el Angliru, el Zoncolan o Lagos.
¿Se ha agotado el modelo de llegada a Bilbao previo paso por El Vivero?
-No, para nada. A mí esa llegada me encanta. No lo considero para nada agotado. Hubo muchísima gente hace dos años. Para nosotros llegar a las grandes ciudades es muy importante, sobre todo, por el público que concitamos, pero además la llegada a Bilbao con ese doble paso por El Vivero te permite no solo entrar y llegar, sino entrar y quedarte. Estoy encantado. Aunque a nosotros nos gusta innovar y encontrar sitios nuevos, en ciclismo lo que funciona es insistir. Estoy encantado con ese recorrido o con otro que pudiéramos hacer.
¿Es Bizkaia territorio Vuelta?
-Absolutamente. Bizkaia es territorio ciclista. Aquí se pueden hacer etapas de alta montaña, de media montaña, y, sobre todo, cada vez que vengo aquí me pongo en modo clásica. Es un territorio muy comanche, muy de batalla desde el principio.
Como integrante de ASO, la empresa que organiza el Tour, ¿sabe cómo están las conversaciones para que una etapa de la carrera francesa recale en Euskadi?
Yo, lejos de poder revelar cuestiones que han hablado entre ellos, lo que sí que digo es que existe una enorme voluntad. A partir de ahí, el Tour ha manifestado tanto al Ayuntamiento de Bilbao como a la Diputación que entran dentro de sus planes. ¿Cuándo puede ser? Eso está por determinar. Lo que sí te puedo decir es que las conversaciones han ido más allá de una simple cortesía. Se ha hablado, se ha trabajado, se han propuesto posibles modelos de etapas que se pueden hacer y si eso se hace es porque existe voluntad. Lo que no le puedo dar es una fecha, pero ojalá se haga cuanto antes.
¿Trabajan con la idea de seguir colaborando con la Diputación para desarrollar más etapas de la Vuelta en suelo vizcaino?
-Para nosotros el País Vasco es un territorio importante, pero, sobre todo, necesario. Aquí se pueden escribir grandes páginas del ciclismo. La fórmula es siempre un éxito.
El Tour repartió sus invitaciones. ¿Han decidido ustedes cuáles serán los equipos invitados a la carrera?
-Ahora mismo tenemos una idea clara en la cabeza, pero en este momento no me puedo manifestar con los invitados. Este año es más difícil tomar esa decisión porque en España habrá más equipos y eso hará que haya más descartes.
A estas alturas no puede asegurar entonces que Euskadi-Murias va a tener un lugar en la Vuelta.
-No lo puedo asegurar por respeto a los demás invitados, pero desde luego no está para nada descartado. Mi mensaje es de mucho optimismo.
¿Cree que con la aparición de la Fundación Euskadi, ambos equipos deberán unirse?
-En ese aspecto no puedo opinar. Mi opinión podría ser tomada como una interferencia o una intromisión. Lo único que digo es que las estructuras que haya, tienen que ser estructuras fuertes. Lo que necesitamos son proyectos a medio y largo plazo.
Esta campaña los equipos en carrera pasarán a ser de ocho corredores en las grandes Vueltas. ¿Qué opina de esta medida?
-Estoy de acuerdo con la propuesta de los organizadores. Llevamos mucho tiempo persiguiendo este recurso. Buscamos que haya un menor control de carrera, que sea menos previsible la competición, que haya más emoción, y por otro lado creemos que la reducción del tamaño del pelotón mejorará la seguridad.
¿Cómo se le quedó el cuerpo tras conocer el positivo de Chris Froome en la Vuelta?
Se te queda mal cuerpo. Realmente fue un año maravilloso el 2017, pero la alegría quedó sometida a un jarro de agua fría. Lo digo por la situación. La gente cuando me dice, tú que quieres que pase, yo siempre digo que lo que quiero es que no hubiera pasado. Como ya ha pasado, me toca estar expectante ante la situación. No prejuzgamos ni a favor ni en contra. Lo que sí hemos dicho es que yo creo que se tiene que resolver lo antes posible.
Contador recibió un homenaje en la presentación de la carrera y fue honrado el pasado Vuelta con el número 1. ¿No es un mensaje equivocado rendir homenaje a un corredor que dio positivo?
A ver, es un corredor que, efectivamente fue sancionado, pero es un corredor que cumplió su sanción. Por lo tanto, si cuando cumples la sanción y estás acatado a la norma hay está. A partir de ahí, corrió como ha corrido y nos ha dado un extraordinario espectáculo. Yo no veo nada censurable en la situación de Alberto Contador después de ese positivo, que si hablas con él te lo va a contar de otra manera. No me meto en esa cuestión. Lo único que digo es que ha cumplido y si no estaríamos negando el efecto de la recuperación, si no estaríamos negando el efecto de la rehabilitación? A partir de ahí me quedo con su trayectoria y su manera de correr.
¿Observa en Mikel Landa el relevo natural de Alberto Contador?
-Yo creo que Mikel Landa es Mikel Landa y Alberto Contador, Alberto Contador. Mikel es un corredor un corredor muy espectacular. Solo espero y deseo que dé muchas tardes de gloria.
¿Le ve como futuro ganador de la Vuelta?
-No lo sé, pero que puede ganar una Vuelta, sin duda. Puede ganar un Giro o un Tour. Tiene condiciones para estar entre los grandes corredores del pelotón. Mikel va a ser un referente.
¿Le espera dando guerra en esta edición de la carrera?
-El otro día Landa anunció que va a venir a la Vuelta. Más contento no me pude ir de la presentación.