bilbao - Está claro que Garbiñe Muguruza y el US Open no conectan. La tenista vasco-venezolana quedó ayer fuera en la segunda ronda, el que sigue siendo su techo en el Grand Slam neoyorkino tras cuatro participantes. Anastasija Sevastova, que en los últimos años estuvo medio retirada, aprovechó uno de sus días en que Muguruza parece más la número 300 del mundo que la número 3 y logró la primera victoria de su carrera ante una Top 5. El marcador de 7-5 y 6-4 deja claro que si la de Caracas hubiera hecho las cosas un poco mejor habría ganado con cierta comodidad.

Pero acumuló 38 errores no forzados, la mayoría por errores de posicionamiento ante la pelota, perdió su saque en seis juegos consecutivos y cada vez que tuvo que llevar la iniciativa, falló con estrépito. Le ocurrió con 4-2 y saque, luego 5-4 y saque en el primer set en el que no pudo siquiera llegar a una bola de set. Se metió en el agujero y la letona encadenó siete juegos seguidos que la dispararon al 4-0 en el segundo parcial. Muguruza parecía hundida con 5-1 en contra, pero llegó hasta el 5-4 y saque y, de nuevo, desperdició la posibilidad de alcanzar un incierto tercer set y cerró su concurso en los Grand Slams de este año con el título de Roland Garros y la eliminación sin llegar a la segunda semana en los otros tres.

En los tres casos, sus rivales fueron jugadoras de un perfil opuesto al de Garbiñe Muguruza y que a la vasco-venezolana se le dan muy mal. Sevastova, como Strycova o Cepelova en Australia y Wimbledon, es pequeña, pero con buena mano y ayer se limitó a pasar bolas al otro campo, a tender trampas con cambios de altura y fuerza y Muguruza cayó en todas. En Roland Garros, donde las expectativas se dispararon, la de Caracas logró aunar potencia y control y pareció imbatible para cualquiera, pero desde entonces ha perdido la segunda virtud y su temporada es un tiovivo de resultados. Aún con todo, se ha mantenido siempre dentro de las cinco primeras del ranking. Pero esa posición corre peligro tras el US Open y, sobre todo, en la gira asiática en la que Garbiñe Muguruza dio el salto definitivo hace un año y ahora defenderá 2.375 puntos. “Esto no va a pararme. Claro que hubiese querido llegar más lejos, pero no voy a darle muchas vueltas, la verdad”, comentó tras su derrota en Nueva York, que le dará unos días añadidos de descanso, “pero lo mejor es seguir jugando. Prefiero seguir jugando y tener más oportunidades, en vez de optar por un descanso largo, aunque haya terminado así”.

nadal, sólido Por su parte, Rafa Nadal avanzó a la tercera ronda con una sólida victoria en tres sets ante el italiano Andreas Seppi en un duelo celebrado en la renovada y enorme pista central Arthur Ashe de Flushing Meadows y con una particularidad: por primera vez en la historia se jugó bajo techo, lo que multiplicó el bullicio que se crea en el torneo neoyorkino. Pero el balear recordó que “este es un torneo al aire libre y no porque caigan cuatro gotas hay que cerrar el techo. Pero está bien que exista esa posibilidad”. Nadal jugará en tercera ronda ante el ruso Andreu Kuznetsov en la parte alta del cuadro de la que se cayó Milos Raonic, quinto cabeza de serie y eliminado por el estadounidense Ryan Harrison.

Ayer mismo se comprobó la utilidad de esa pista cubierta en Nueva York cuando la lluvia, como ocurrió en Roland Garros, en Wimbledon y en los Juegos de Río, trastocó todo el programa de la cuarta jornada y obligó a suspender los partidos de las pistas exteriores. En la central, Simona Halep pudo con Lucie Safarova y Andy Murray con Marcel Granollers en duelos aún de la segunda ronda.