TRAPAGARAN. "Los últimos kilómetros eran muy peligrosos y las rampas finales, muy explosivas. Me he defendido en un terreno que no es el mejor para mi y he tratado de ceder el menor tiempo posible", ha comentado 'Samu' tras cruzar la línea de meta instalada tras una pared de 500 metros con rampas de hasta un 21% de de desnivel. "Hay ciclistas más explosivos que yo y tienen que aprovechar su terreno", ha añadido el ciclista asturiano, decimotercero en la general a 26 segundos de Henao, satisfecho de estar aún "en el abanico que puede pelear por hacer cosas importantes en esta carrera".

Por su parte, Igor Antón, noveno y mejor corredor del Euskatel en La Lejana, ha apuntado que ha ido "de menos a más" a lo largo de la etapa después de "no ir bien" en la primera parte del recorrido. "En la parte decisiva me he encontrado mejor y cuando se ha apretado, las piernas han respondido. Quizá podría haber estado un poco más adelante, pero ahora solo vale mirar a Arrate", ha concluido el vizcaíno.