bilbao. Dos días después de que el Adarraga de Logroño entrara en ebullición para celebrar la clasificación de Titín III y Merino II para la gran final de San Mateo que tendrá lugar esta tarde, a partir de las 18.00 horas (ETB-1), el santuario riojano vuelve a abrir sus puertas para albergar la última batalla por el cetro de la feria. Un torneo al que opositan con sed de éxitos y de revancha Pablo Berasaluze y Jon Ander Albisu, quienes se vieron superados por el binomio riojano en los dos envites que ambas duplas protagonizaron en el último Campeonato de Parejas.

En el primero de ellos, disputado el pasado 29 de enero en el frontón Bizkaia, Titín III y Merino II se impusieron 20-22 a Pablo-Albisu, mientras que el 18 de marzo, la diferencia en el marcador final fue aún mayor para la pareja riojana (22-14). Un duelo que tuvo como escenario al Adarraga, que vuelve a albergar hoy un enfrentamiento entre ambas parejas. Dos duplas que encaran la final de esta tarde con sensaciones positivas tras haber triunfado en sus respectivos grupos. Pablo y Albisu, ambos en un gran estado de forma, dejaron en la cuneta a Aimar Olaizola-Alexis Apraiz y a Xala-Barriola, dos parejas a las que se impusieron 22-20 y 22-19, respectivamente.

Titín y David, por su parte, encuadrados dentro del grupo A, vencieron por un apretado 22-21 a González-Zubieta en la primera jornada, antes de despachar sin compasión a Bengoetxea VI y Begino por un contundente y esclarecedor 22-8. Victoria que otorgó el billete para la final de San Mateo a los vigentes campeones del Parejas, ídolos en su tierra, y que volverán a saltar esta tarde al Adarraga espoleados por el incondicional apoyo de sus paisanos. Fieles aficionados a la mano que, a buen seguro, rememorarán el gran ambiente creado el viernes con el fin de llevar en volandas al binomio riojano, catapultado por el buen hacer en los cuadros alegres del insaciable delantero de Tricio y la consistencia defensiva del zaguero de Villar de Torre.

Y es que David, que vio cómo su juego bajaba en efectividad y seguridad tras la final del Parejas, campeonato en el que dominó con puño de hierro sobre el resto de zagueros, parece haberse aliado de nuevo con su mejor versión bajo el cobijo de su gente. Sensaciones similares a las que transmiten como pareja Pablo y Albisu, quienes aterrizan en la última lucha por el cetro de San Mateo ligeros de piernas y fuertes de manos. No en vano, lejos de amedentrarse ante las imponentes siluetas que reinaban en su grupo y alentados por el gen de la competitividad, el delantero berriztarra y el zaguero de Ataun certificaron con paso firme y juego vistoso su presencia en una final que, a priori, asoma presa de la igualdad y la incertidumbre.

dinamita en los cuadros alegres Así, con ambas parejas sobradamente preparadas y dispuestas para afrontar tamaña cita, una de las más destacadas y esperadas de cuantas se han disputado desde que la temporada oficial tocara a su fin tras la final del Manomanista, tanto los últimos cuadros con la batalla entre Merino II y Albisu, como los cuadros alegres, que rezumarán pura dinamita con Titín III y Pablo, serán escenarios de una contienda que el berriztarra y el ataundarra tratarán de hacer suya para reinar en San Mateo y consumar la revancha tras las dos derrotas sufridas en el último Parejas.