BILBAO. Juanito Oiarzabal estámucho más cerca de hacer dobleteen los catorce ochomiles. El alavésholló en la mañana de ayer la cimadel Manaslu, de 8.156 metros, con loque solo le quedan cuatro grandescumbres para hacer historia y serla primera persona que repite lospicos más altos del planeta. Además,con este nuevo éxito, el alavéssuma 26 ochomiles y refuerza sucondición de ser humano con másmontañas que superan los 8.000metros a sus espaldas.
La cima de ayer -conseguidasobre las nueve de la mañana, horanepalí- fue muy costosa y el alpinistavasco tuvo algunos problemasen el descenso. El esfuerzo de laascensión y las adversas condicionesclimatológicas -con un viento muyintenso y frío que no cesó desde quepartió hacia la cumbre a las dos dela madrugada- le provocaron la pérdidade la visión en el ojo derecho yproblemas respiratorios.Y es que elgasteiztarra, encima, arrastra problemaspulmonares desde su anteriorexpedición en el Lhotse, lograda en el pasado mes de mayo y en laque se tuvo que enfrentar a una durísimabajada. El montañero teníaayer la intención de descender hastael campo 2 y pasar allí la nochedescansando. Después, sus planespasaban por estar “probablementeeste fin de semana o a primeros de laque viene en casa”. “He tenido problemaspara bajar, he tardadomucho,me han tenido que ayudar y,si digo la verdad, estoy jodido y,sobre todo, dándole vueltas a la cabeza.
He tenido que utilizar un poco deoxígeno para llegar al campo 3 yestoy un poco preocupado. Tampocoquiero alarmar a nadie pero yocreo que es consecuencia de que lalesión de esta primavera no se hacurado bien”, aseguró Oiarzabal asu llegada al segundo campo de alturatras hacer cima.
Pese a las complicaciones sufridas,este nuevo ochomil llenó de alegríaal alavés: “Estoy tan contento yemocionado de haber conseguidoesta cumbre como cuando subí miprimer ochomil. Cada vezme resultamás duro y por eso la satisfacciónes también mayor cada vez”.