Una exposición rinde homenaje a la industria vasca

Itsasmuseum acoge la exposición Ars ex Industria, una muestra colectiva de arte contemporáneo que rinde homenaje a la huella de la industrialización vasca a través de la creación artística. Organizada por la Asociación Vasca de Patrimonio Industrial y Obra Pública (AVPIO), constituye una de las actividades centrales de los actos conmemorativos del 40º aniversario de la Asociación, entidad pionera en la defensa del patrimonio industrial en el Estado. 

Durante este año, se ha desarrollado un conjunto de acciones dirigidas principalmente a su base social, pero es con esta exposición con la que culmina su celebración, apostando por el arte como herramienta de memoria, emoción y proyección de futuro.

La exposición reúne 36 obras de artistas vascos, estatales e internacionales que, desde los años 80 hasta la actualidad, han reflexionado desde el arte sobre el universo estético, simbólico y social de la industria. A través de la pintura, la escultura, la fotografía, la instalación o el vídeo, la muestra no se limita a ilustrar el pasado industrial vasco, sino que lo interpreta, lo transforma y lo resignifica.

Más que una exposición

Comisariada por Alberto Salcedo Fernández, reconocido por su trayectoria investigadora y curatorial en la intersección entre arte, territorio y patrimonio, se ha tejido un relato visual poderoso, plural y profundamente evocador, que pone en valor cómo el hecho industrial ha sido inspiración para generaciones de artistas, en el trabajo, con los paisajes fabriles, con nuestras transformaciones sociales y culturales.  

“Es más que una exposición. Es un homenaje a todas las personas que han defendido el valor cultural de nuestro pasado industrial. Es una declaración de principios. Una forma de decir que el patrimonio industrial no solo debe conservarse: debe inspirarnos”, explican desde la organización.

Durante los cinco meses que durará la exposición, la AVPIOP organizará un extenso programa de actividades: charlas con artistas participantes, diálogos abiertos y encuentros con expertas y expertos del ámbito del patrimonio, el arte y la historia industrial.

El objetivo es abrir espacios de reflexión compartida sobre los retos de futuro que afronta el patrimonio industrial vasco en términos de preservación, uso social, resignificación y transmisión a las nuevas generaviones. “No es solo una muestra de creación artística: es una apuesta cultural decidida por resignificar la historia reciente de Euskadi. Por tender puentes entre la experiencia del trabajo y la creación contemporánea, entre la herencia fabril y la imaginación colectiva”, señalan los organizadores.