El auditorio del Conservatorio Juan Crisóstomo de Arriaga de Bilbao albergó ayer la presentación de 10 Urte, el CD en el que Euskadi Brass conmemora su décimo aniversario. Se trata de la primera grabación de este formación de viento metal, que hace un repaso a toda una década en la que ha habido mucho más que música. Y es que además de compartir con el público su maestría con trombones, trompetas, trompas o tubas, estos músicos, la mayoría de ellos pertenecientes a grandes orquestas sinfónicas, están implicados en el impulso de un proyecto socioeducativo con el que hacer comunidad en torno a estos instrumentos.

Buena muestra de ello fue la participación ayer, en el concierto de presentación de 10 Urte, de jóvenes alumnos del Conservatorio de Bilbao, que interpretaron junto a los miembros de Euskadi Brass las dos últimas piezas con las que se cerró el recital. “Hemos adaptado esa parte del repertorio al nivel de los alumnos, porque nuestra intención no era hacer un concierto de Euskadi Brass, sino mostrar el CD y también lo que supone este proyecto, que es estar con los jóvenes”, señalaba Alberto Urretxo, responsable artístico del conjunto.

Ensayo de Euskadi Brass en Bilbao

Ensayo de Euskadi Brass en Bilbao José Mari Martínez

“Creemos en la importancia de generar algo más que el juntarnos los músicos a tocar, algo que sirva de inspiración a los jóvenes para que esto que hacemos nosotros tenga continuidad”, añade Urretxo. El trombón solista de la Bilbao Orkestra Sinfonikoa (BOS) recuerda que, cuando fundó en 2014 Euskadi Brass junto a Óscar Abella –tuba solista de la Euskadiko Orkestra–, “la idea era crear una comunidad con compañeros profesionales”. Pero pronto percibió la necesidad de ir más allá e impulsar “un proyecto social”. Eso se ha traducido en la realización de “talleres de trombón, trompeta y trompa” para jóvenes instrumentistas en los que, además de clases magistrales, “damos charlas para que conozcan las experiencias de los profesores sobre cómo han llegado a ser profesionales. Parece que de la escuela de música del pueblo a una orquesta sinfónica hay todo un mundo y se trata de acercarlo”.

“Creemos en la importancia de generar algo más que el juntarnos los músicos a tocar”

ALBERTO URRETXO - Responsable artístico de Euskadi Brass

En esa línea, Urretxo también muestra su disposición a incorporar a Euskadi Brass a estudiantes de Musikene y de la Euskal Herriko Gazte Orkestra (EGO) “para darles la oportunidad de tocar con profesionales”. Del mismo modo, destaca su apuesta por “las nuevas creaciones” de compositores locales, lo cual se ve reflejado en el CD presentado ayer. No en vano, este arranca con la Fanfarria Juan Arzamendi Musika Etxea, escrita por la arrasatearra Beatriz Arzamendi con motivo de la inauguración del nuevo edificio que alberga la escuela de música de Mondragón, la cual lleva el nombre de quien fuera su padre. Se trata de una pieza muy especial para Urretxo, natural de Arrasate y que ha sido alumno, primero, y profesor, después, de dicho centro. En esta segunda etapa, hace 30 años, participó en Mondragón Brass, embrión de lo que, dos décadas después, sería Euskadi Brass.

El disco 10 Urte incluye también un homenaje a Philip Jones Brass Ensemble, en el que se interpretan arreglos y piezas originales que creó este grupo “pionero en este tipo de formaciones”. En el bloque final, bajo el epígrafe Desde los Cárpatos a Euskal Herria, se puede escuchar un arreglo de las Danzas Folklóricas Rumanas de Béla Bartók, así como Kolore Zortzikoa, del navarro Eneko Azparren, y The Guiding Star, del albaceteño Ricardo Mollá. Estas dos últimas obras, dedicada la primera y adaptada la segunda para Euskadi Brass, son encargos de Tubala Brass Week, el festival de música de viento metal que se celebra en Tafalla. Precisamente, la duodécima edición de este evento será el marco en el que la formación liderada por Urretxo celebrará el próximo 6 de diciembre una segunda presentación de 10 Urte, el cual también podrá escucharse el 14 del mes de que viene en la citada Juan Arzamendi Musika Etxea de Arrasate.

Son 19 los músicos que han participado en la grabación de este repaso por la trayectoria de Euskadi Brass, formación por la que han pasado un total de 85 instrumentistas, entre ellos el trombonista gallego Daniel Portas, fallecido este año y gran amigo de Urretxo, quien ha querido dedicarle este disco: “Para mí es un ejemplo”.

Con Valencia

No se olvidan. Valencia es una cantera inagotable de músicos, con presencia en multitud de agrupaciones. Euskadi Brass no es una excepción. De este grupo forma parte Vicente Olmos, natural de Paiporta y trompetista de la BOS. “Colaboraremos para ayudar a las bandas de Valencia, pero más de cara a verano, cuando parezca que ya ha pasado todo, pero no sea así”, dice Urretxo, quien espera tocar por Levante y también vivir el estreno de este ‘ensemble’ fuera del Estado.