Cuando se oye la música de compositores como Haendel, ya te sientes atrapado por ella para toda la vida. Es un fenómeno que no tiene vuelta atrás, cuando entras en contacto con los compositores barrocos, ya no los dejas. Y si además, si se escucha interpretada por instrumentos originales de la época, resulta mucho mejor. Es lo que piensa Pedro Gandía Martín, director de la orquesta vasca barroca Propitia Sydera, que volverá a protagonizar uno de los conciertos de esta 35 edición del festival de Ziortza-Zenarruza, que arrancará este sábado, y que ofrecerá durante los dos próximos fines de semana actuaciones de renombrados grupos y solistas locales e internacionales. En total, serán seis los conciertos que volverán a envolver de música el interior de la colegiata, creando un entorno mágico y especial.

“Cuando Vivaldi y Haendel componían, estaban pensando en un espacio de las características de las de Ziortza”, explica Pedro Gandía, violinista y director, que se pondrá el próximo día 16 al frente a la agrupación Propitia Sydera, formada en su mayoría por músicos vizcainos que han disfrutado de becas para el estudio de la música barroca en el extranjero.

La agrupación tomó su nombre de uno de los concerti grossi más importantes del compositor Georg Muffat. Nació con el objetivo de ofrecer el repertorio barroco y clásico de la manera más actual y fiel a la época en el que fue compuesto. Sus miembros tocan con los mejores grupos barrocos de la escena internacional (Hesperion XX, Cafe Zimermann, Orquesta Barroca de Sevilla, Musiciens du Louvre, Zefiro, Das Neue Orchester…) y han actuado con músicos como Wilbert Hazelzet, Alfredo Bernardini, Saskia Salembier, Anna Fusek o Petros Bakalakos. Desde 2018 es la orquesta residente del Festival de Ziortza-Zenarruza.

La orquesta Propitia Sydera tocará en la colegiata el sábado día 16.

En el concierto del festival de Ziortza del próximo día 16, estarán acompañados por la soprano italiana Roberta Mameli, especializada en el periodo barroco, que pondrá la voz en un programa sobre la mitología en la música con obras de Vivaldi, Graun y Haendel. “Cada año traemos a prestigiosos músicos que vienen para compartir el espacio y la música con nosotros. Mameli es, sin duda, una estrella internacional. Además, en la orquesta hay gente que toca con músicos de gran prestigio, pero no teníamos una agrupación con la que tocar aquí juntos, en el País Vasco, por eso formamos Propitia Sydera ”, explica este violinista, que ha sido durante 25 años director artístico de la Orquesta Barroca de Sevilla y es profesor de Musikene.

“Hoy en día, cada ciudad tiene su orquesta barroca. Y en Bilbao, hay afición por la música antigua, como se demuestra en festivales como el de Musika-Música o Ziortza”, asegura.

Pedro Gandía Martín considera que la música barroca está en un aumento exponencial. Los músicos siempre buscan nuevas formas de expresión y, en este caso, la música antigua permite abordar el arte desde otra perspectiva. “Al final, de los años 80 había como dos bloques enfrentados, los modernos y los barrocos, ahora hay un mix entre los dos mundos, que ha traído cosas positivas y negativas. Estéticamente, son grupos barrocos, pero no han hecho estudios sobre ello”.

El músico vasco resalta la importancia de tocar con instrumentos originales: “Supone un coste superior, pero aporta un color diferente a la música”. Su violín italiano original se ha convertido en un compañero de viaje. Lo compró en Madrid y es del siglo XVIII. Un amigo le llamó y le dijo que un luthier tenía un violín barroco que quería modernizar. Se cogió el primer autobús y se lo compró antes de que lo manipulara. “En realidad, es de sentido común, a nadie se le ocurriría pintarle grafitis a un Picasso”, asegura.

Datos

35 años. Este sábado, 9 de septiembre, arrancará la XXXV edición del ciclo ‘Ziortza Kontzertuak’, que tendrá lugar durante los días 9, 10, 16 y 17 de este mes de septiembre.

Seis conciertos. La colegiata de Zenarruza albergará seis conciertos durante esta edición, que cumple 35 años, y cuenta una vez más con la implicación de la Diputación de Bizkaia, la Fundación BBK, la Fundación Gondra- Barandiaran, el Ayuntamiento de Ziortza-Bolibar y Koldo Narbaiza, como alma mater del festival.