Esta semana se han cumplido 340 años de la Fundación de la Cofradía de Nuestra Señora de Arantzazu de México. Por este motivo, como ya explicó DEIA, desde Limako Aranzazu Euzko Etxea se plantearon que querían hacer algo especial para expresarles su afecto y pensaron que podía ser desde la música.

Aquellos vascos que llegaron a Perú en 1612 decidieron poner en marcha la Hermandad de Nuestra Señora de Aranzazu de Lima con un espíritu de comunidad que ha llegado hasta hoy y que se mantiene vivo entre la comunidad vasco-descendiente en aquel país. La Hermandad de Lima inspiró a los vascos del resto de la América colonial y su modelo, con adaptaciones locales, fue la guía para otras agrupaciones, como las de Santiago de Chile o de México.

Los descendientes de aquellos vascos que llegaron a Perú decidieron realizar la grabación de un video para regalar a los vascos mexicanos en un lugar muy especial, frente al altar del Santuario de Nuestra Señora de Arantzazu, en Oñati. Para ello, contaron con la colaboración de la Asociación Euskadi-Munduan Elkartea, responsable del blog aboutbasquecountry.eus, que dirige Javier Pérez y donde se recoge el video. Además, de las facilidades dadas también por la comunidad franciscana encargada del santuario, según explican desde la hermandad de Aranzazu de Lima.

Marion Desjacques, la arpista de la Orquesta Sinfónica de Bilbao (BOS), fue la encargada de interpretar esta melodía ante el imponente retablo mayor, donde dice la tradición que, a un pastor llamado Rodrigo de Balzategi se le apareció la Virgen sobre un espino. La melodía fue descubierta en el manto de la Virgen de Guadalupe por el estudioso de la Virgen Fernando Ojeda Llanes. En base a un trabajo matemático, y tomando las flores y las estrellas en la imagen de la Virgen como si se tratara de notas musicales.

Junto al video enviado a México, se ha remitido también un saludo del presidente de la Euskal Etxea de Santiago de Chile, Ignacio Bastarrica, y el Agur Jaunak cantado por el coro de este centro vasco.