bilbao - Hace seis meses que Miguel Zugaza ocupó de nuevo su despacho en el Bellas Artes de Bilbao tras pilotar durante 15 años la entrada del Prado hacia el siglo XXI. Ayer, el actual director de la pinacoteca aprovechó un encuentro con los medios de comunicación para ofrecer un balance de estos primeros meses y avanzar las novedades expositivas que llegarán al museo durante este otoño.
Los datos hablan por sí solos: el museo ha superado, hasta este pasado 12 de septiembre, los 205.000 visitantes, un incremento del 18,5% respecto al mismo periodo de 2016. Además, entre septiembre de 2016 y el mismo mes de 2017, más de 300.000 personas han visitado la pinacoteca, debido sobre todo a exposiciones de gran impacto. Por cifras, más de 27.000 personas han visto la exposición del Greco y cerca de 55.000 ha acudido a ver la Colección de Alicia Koplowitz. De este modo, las últimas exposiciones temporales han permitido incrementar en más de un 31% los visitantes de pago.
Un importante logro conseguido tras la incorporación de Zugaza a la pinacoteca, aunque él siempre ha defendido que uno de los retos que los museos del siglo XXI tienen que afrontar en la actualidad es “defenderse contra la dictadura de las audiencias. El éxito no depende del número de visitantes”. Se mostró muy satisfecho del incremento de amigos del museo, 288 en lo que va de año, “lo que supone una buena base social de apoyo al centro”.
presupuesto ajustado Cuestionado por el presupuesto que maneja el Bellas Artes para desarrollar su actividad, en torno a 8 millones de euros, Zugaza estimó que es “muy ajustado”. “Nada más llegar, el anterior director, Javier Viar, me dijo que el presupuesto se acababa en junio. Por eso, tiene que crecer tanto en lo referido a los recursos propios del museo como a las aportaciones de las instituciones propietarias del mismo”, explicó. En estos meses, Zugaza ha logrado convencer a tres grandes compañías para que se impliquen en su plan, para que le respalden financieramente y hacer más grande el museo bilbaino.
Con las limitaciones financieras y con la experiencia y contactos adquiridos en estos tres lustros, ha elaborado una programación expositiva para el próximo otoño, que arrancará el 19 de septiembre, con la llegada de la obra invitada Femme assise dans un fauteuil (Dora), vinculada con dos obras fundamentales de Picasso como son los ciclos del Guernica y el Osario. Se trata de una obra propiedad de la Fundación Beyeler, de Basilea , que ha participado en la reciente exposición dedicada por el Museo Reina Sofía de Madrid al cuadro más emblemático del pintor malagueño, el Guernica.
Le seguirá, el 26 de octubre, la exposición anual dedicada al mundo del grabado que se presenta con motivo de la celebración de la Feria Internacional del Grabado (FIG) de Bilbao y que estará dedicada en esta ocasión al Grabado a color en la colección del Museo de Bellas Artes de Bilbao. La sala BBK, que acoge hasta el próximo 23 de octubre la exitosa Colección de Koplowitz, tiene prevista la llegada, a partir del 30 de noviembre, de la colección de pinturas y esculturas de Eduardo Arroyo, considerado como “uno de los pintores más destacados del arte español de la segunda mitad del siglo XX”. Una “gran exposición” que presenta las obras más recientes del pintor como Le retour des croisades, inspirada en el lienzo monumental de Zuloaga, Víctima de la fiesta.
Pero antes, el 8 de noviembre, el Bellas Artes reunirá por primera vez las obras del pintor italiano Giuseppe Arcimboldo, conservadas en colecciones estatales con la exposición Las Floras y la Primavera que recoge también documentación diversa que ayuda a su contextualización. “Una muestra de mediano formato, pero de una grandísima calidad”, expuso Zugaza. Además, se mostrará la última adquisición de la pinacoteca, la Vista de Bermeo, del pintor Luis Paret. Zugaza anunció que, para sufragar el coste de esta obra, adquirida gracias a un préstamo concedido por la Fundación Bancaria BBK que hay que devolver, se realizará en otoño una campaña de captación de nuevos Amigos del Museo y se solicitarán aportaciones voluntarias a los más de 2.500 que ya lo son en la actualidad.
Ampliación Zugaza anunció un plan estratégico en su reencuentro con el Bellas Artes. El Patronato le ha encargado un Plan de actuación con visión estratégica, que sirva para dirigir el museo hacia el futuro. “En estos momentos, estamos reflexionando. Esto no se puede hacer a la ligera”, explicó Zugaza. Pero, si hay algo que tiene claro el actual responsable de la pinacoteca, es que uno de los puntos débiles del museo es su limitación de espacio. “Tenemos más de 3.000 obras depositadas que no se pueden mostrar”, reconoció, para comentar que hay que analizar las “posibilidades y diferentes alternativas” que existen de cara a un futuro proyecto de ampliación. “Hay funciones que este museo puede hacer en otros espacios”, dijo. Zugaza anunció que quieren dar “una vuelta a la actual fachada del museo ya que da la espalda a la nueva expansión urbana de la zona”.