l AS cuevas suelen ofrecer vestigios importantes de la historia de los pueblos. Bien lo sabemos los vizcainos gracias a Santimamiñe y Pozalagua. En Iparralde, las cuevas de Isturitz, Oxocelhaya y Lezia/Aude Labarge, esta última escondite de contrabandistas, han permitido rescatar esculturas, colgantes, ornamentos, objetos musicales y pinturas. El aficionado a la arqueología puede adentrarse en ellas los domingos a título individual o en una visita guiada que organiza la Diputación de Bizkaia la semana próxima.
Lugar emblemático de la prehistoria, memoria viva de nuestra humanidad. Así tildan los entendidos a las cuevas de Isturitz y Oxocelhaya, ubicadas en Benafarroa y pertenecientes a la Red de Arte Rupestre de la cadena Pirenaica. Junto a la de Lezia, sita en Lapurdi, forman “uno de los hitos más relevantes del patrimonio cultural de Euskadi”, según los expertos, que destacan “los importantes vestigios de nuestra prehistoria” que atesoran.
La Cueva de Isturitz está ubicada en Saint Martin d’Arberoue y es un referente para el conocimiento de la Prehistoria europea dada su dilatada y densa ocupación humana durante todos los periodos prehistóricos. Los miles de materiales recuperados, principalmente esculturas, colgantes, ornamentos y objetos musicales, permiten identificar una cultura específica, de la que el territorio vasco formó parte durante la última glaciación.
En el caso de Oxocelhaya, conectada con Isturitz, presenta un recorrido repleto de imponentes formaciones de calcita y oculta galerías con grabados y pinturas, que representan fundamentalmente caballos, bisontes y ciervas, además de puntos y manchas. Y la de Lezia, sita en Sara, fue ocupada por primera vez hace unos 25.000 años por una comunidad de cazadores-recolectores. En ella se han hallado cerámicas y restos óseos humanos de la Edad de Bronce. Se cuenta que en épocas mucho más recientes fue refugio, escondite de contrabandistas y lugar de reuniones clandestinas.
La Diputación Foral de Bizkaia ha organizado una visita guiada con especialistas para el sábado día 19, con un coste de 50 euros, comida y desplazamientos incluidos. Las plazas son limitadas. Los interesados deben contactar con el teléfono 94 404 09 90 o en el correo electrónico arkeologimuseoa@bizkaia.eus.