Madrid - La moda estatal es mucho más que el diseño de una prenda, es una manera de vivir y de sentir que traspasa la pasarela para subirse a los escenarios, en una fructífera colaboración entre diseñadores y creadores de disciplinas artísticas como la danza, el teatro o el séptimo arte. “La moda no acaba en una falda, amplía sus horizontes y se sumerge en otras disciplinas como la creación de vestuario para ballet, teatro o cine”, explicó el diseñador Juan Duyos durante el desayuno 60 minutos de moda con EFE Estilo, en el que también participaron el creador David Delfín, y el director del Ballet Nacional de España (BNE), Antonio Najarro.

Una colaboración entre creadores que ha dado muchos frutos a lo largo de la historia de la moda, con históricos como Balenciaga o Jesús del Pozo, y que hoy está en manos de contemporáneos como David Delfín, Juan Duyos, Nicolás Vaudelet o Teresa Helbig. Uno de los exponentes más recientes y trending topic en redes sociales fue el desfile del diseñador madrileño Juan Duyos, en colaboración con el BNE y comunión con su director y coreógrafo, Antonio Najarro. “Un reto en el que los tejidos se pusieron al servicio de la coreografía”, recordó Duyos. El diseñador se enfrentó a medidas de mujeres reales, “tallas 38 o 40”, y a piruetas y pasos que le exigieron ajustar “sisas y aberturas”, bajo la mirada de Najarro. No es la primera vez que el director del BNE apuesta por un modisto para crear el vestuario de una de sus coreografías. Su primera experiencia fue junto a Nicolás Vaudelet en el espectáculo Sorolla.

En los armarios del Ballet Nacional de España conservaban trajes de época, con telas originales, imposibles de encontrar y de reproducir hoy, que Vaudelet transformó, desde el respeto a su historia y fiel a los pasos de baile.

Delfín También se encuentra la experiencia de David Delfín, que diseñó el vestuario de Chapter 10 (2009) y Nippon-Koku (2014) para la Compañía Nacional de Danza (CND). “El bailarín debe sentirse cómodo y el diseñador contento con lo que hace”, dijo el director del BNE. “La danza española tiene una gran acogida en el exterior, más aún si el vestuario también lleva sello made in Spain, un elemento más que refuerza la entidad del espectáculo”, comentó Najarro, quien lo definió como un “pack” de éxito.

El director del Ballet Nacional de España se mostró muy ilusionado con la preparación de su nuevo proyecto Alento, cuyo vestuario confecciona la diseñadora catalana Teresa Helbig: “Son diseños valientes, muy españoles pero con una estética muy vanguardista, alejada del volante”. En particular, destacó la difícil creación de Helbig: una espectacular bata de cola de tres metros que las bailarinas deben poder mover con soltura.