Nacido como un proceso que busca fomentar las relaciones interculturales y favorecer la cohesión social, la convivencia y una mejor calidad de vida de todo el vecindario, Auzoak Abian, iniciativa impulsada y desarrollada en los barrios de Irala y Ametzola, cumple una década. Con motivo de esta efeméride se han celebrado este viernes las jornadas técnicas 10 años de Proceso Comunitario. Experiencias y aprendizajes, que han sido inauguradas por Juan Mari Aburto, alcalde de Bilbao.

En palabras del primer edil, “esta iniciativa es uno de los mejores ejemplos de cómo todas y todos construimos ciudad y somos barrio, y que conjuntamente podemos transformar la realidad para que sea abierta e inclusiva, favoreciendo no una mera coexistencia sino la convivencia en diversidad”.

Se trata de un proyecto promovido por el Ayuntamiento de Bilbao y la asociación Gazteleku, con el apoyo de la Fundación La Caixa, en cuya representación ha participado en el acto inaugural Francesc Ventura, adjunto a la dirección del área de Inclusión Social. Además, son protagonistas de este proceso instituciones como Gobierno Vasco, recursos técnicos y profesionales de la zona, movimientos asociativos y ciudadanía implicada en la mejora de la convivencia.

El alcalde Juan Mari Aburto ha participado este viernes en las jornadas. Ayuntamiento de Bilbao

Representaciones de todos estos ámbitos, más de cien personas, han participado en la jornada celebrada en el centro municipal de distrito de Rekalde, y que ha tenido como objetivo poner en valor el impacto del trabajo comunitario en red y compartir la experiencia como comunidad, así como reflexionar sobre todo lo aprendido en su desarrollo para consolidarlo e impulsar su mantenimiento hacia el futuro.

AVANCES EN LA INTERVENCIÓN

El encuentro ha permitido resaltar los valores y avances del proceso de intervención comunitaria intercultural que supone una experiencia exitosa de trabajo comunitario, donde se ha creado y fortalecido una red de relaciones ciudadanas interculturales, y se han generado espacios de relación, diálogo y participación.

También se ha contribuido a superar el aislamiento de las personas para ahondar en la pertenencia al barrio, se ha reforzado el trabajo social con infancia, juventud y familias, se ha apostado por la salud comunitaria, se ha facilitado la participación de la diversidad de los colectivos, y en definitiva se ha fomentado la cultura del trabajo común en favor de la mejora de la cohesión social.

Entre los temas abordados han figurado la conferencia inaugural sobre las claves del modelo de intervención comunitaria intercultural, a cargo del antropólogo Carlos Giménez; y le ha seguido una mesa técnica sobre la experiencia de trabajo compartido desde la perspectiva profesional.

Tras una pausa, se han puesto sobre la mesa diversos aprendizajes y retos desde la ciudadanía organizada, y le ha seguido, para cerrar la jornada, la implicación en el proceso de personas de la ciudadanía a título individual.