bilbao - Aunque ya había presentado y aprobado en el Patronato su programación artística para este año, el Museo Guggenheim Bilbao buscaba otra exposición de relevancia para este verano. En enero el museo anunció que se había apostado por una gran retrospectiva dedicada al artista francés Georges Braque, que se abrirá al público el próximo 13 de junio y que se podrá ver hasta el 21 de septiembre. El museo ha elaborado este año una programación muy potente, para ello, ha contado este ejercicio con una aportación extra de la Diputación Foral de Bizkaia de dos millones de euros, que irán destinados íntegramente a las exposiciones.
La retrospectiva dedicada a Braque (Argenteuil-sur-Seine, 1882- París, 1963) que llega a Bilbao viene avalada por el gran éxito obtenido en el Grand Palais de París el pasado otoño, donde se expuso con motivo del quincuagésimo aniversario de la muerte del artista. La exposición recorrerá la trayectoria de uno de los creadores más importantes del pasado siglo XX, desde su periodo "fauvista" hasta su obra tardía, que culmina en las extraordinarias series de los grandes talleres, los pájaros y los paisajes de Varengeville.
Con préstamos del Centre Georges Pompidou y de otras grandes colecciones públicas y particulares internacionales, la muestra acogerá cerca de 250 piezas, entre las que se incluyen algunas de las grandes obras maestras del que fuera precursor del cubismo e inventor de la técnica de collage de los "papiers collés" (papeles pegados).
La exposición profundiza en sus pinturas de naturalezas muertas (donde se reiteran los veladores y los fruteros), sus canéforas, los billares de posguerra, así como los talleres y los pájaros realizados casi al final de su vida, que amplían y resumen sus investigaciones artísticas.
La retrospectiva, que ocupará la segunda planta del museo, incorporará también otros aspectos interesantes de la vida del creador francés, conocido como "el pintor del silencio", debido a su gran timidez, y su relación con otros artistas interesantes de su tiempo, como Pablo Picasso.
En la exposición se podrá ver también la estrecha relación de su arte con la música y su proximidad con Erik Satie. O su complicidad con poetas como Pierre Reverdy, Francis Ponge y René Char, así como con las figuras intelectuales determinantes de su época, como Carl Einstein o Jean Paulhan. "Se trata de un gran acontecimiento artístico -explicaba Petra Joos, directora de Actividades Museísticas del museo bilbaino-. Es la primera vez en más de cuarenta años que se organiza una gran retrospectiva del creador francés".