El Ayuntamiento de Bilbao y la empresa promotora del festival BBK Live, Last Tour han realizado un balance positivo de la última edición del evento musical, al que asistieron más de 115.000 personas de más de 50 países y cuyo impacto económico se estima en más de 23,6 millones de euros.

El festival, que ha celebrado del 10 al 12 de julio pasados su última edición, ha concluido "con unos datos positivos tanto por la calidad de los conciertos, convirtiéndose de nuevo en un referente internacional con la participación de más de 100 artistas, como en público asistente e impacto económico".

Por procedencia, el 17% del público ha llegado de fuera del Estado, siendo Reino Unido, Francia, Italia y Portugal los países con mayor número de asistentes. Otro 42% corresponde al público local, es decir, de la propia ciudad y del resto de Euskadi. A nivel estatal, que alcanza un 41%, las comunidades con más visitantes al certamen han sido la Comunidad de Madrid, Catalunya, Comunidad Valenciana y Cantabria.

Entre los asistentes, el rango de edad se ha ampliado. Ha aumentado el público más joven, pasando ahora a un 43 % de 18 a 30 años frente al 28 % del pasado año en esta misma franja de edad. El 31 % tiene de 31 a 40 años, el 18 % de 41 a 50 años, y el 8 % de más de 50 años.

En la organización del evento, han participado cerca de 3.500 profesionales en diferentes tareas de logística, suministros, servicios, iluminación, sonido, audiovisuales, seguridad o catering, priorizando a los proveedores de Bilbao y Bizkaia.

Hostelería, comercio y alojamientos

Respecto al impacto económico, como primeras cifras se estima superar los 23,6 millones de euros, que repercute de manera especial en los sectores de hostelería, comercio y alojamientos.

Estos últimos han superado nuevamente el 90 % de ocupación hotelera durante las tres jornadas del festival.

El Ayuntamiento de Bilbao y la organización han destacado también que no se ha registrado ningún incidente durante la celebración del festival, en cuya próxima edición ya trabajan sus responsables. Será la edición número 20, que esperan sea especial.

Según explican el Ayuntamiento de Bilbao y Last Tour, " otro de los rasgos diferenciadores de Bilbao BBK Live es su progresivo camino en materia de sostenibilidad, buscando en cada nueva edición disminuir su impacto ambiental y multiplicar su efecto positivo en lo social, cultural y económico. Este año se ha consolidado el espacio BALORE, el punto de encuentro donde se hace visible el compromiso del festival con las personas, el territorio, la diversidad y el planeta". Para la organización “se busca escuchar, aprender y conversar reconociendo el poder transformador de la música como lenguaje universal.”

Tanto para el Ayuntamiento de Bilbao como para la propia organización de Last Tour el objetivo prioritario es seguir incrementando la calidad del propio festival tanto por los conciertos y artistas participantes como por el mayor disfrute del público asistente.