nueva york. Las encuestas no son muy favorables para los demócratas en las elecciones legislativas que se celebrarán el próximo 2 de noviembre en Estados Unidos. Ante el temor de que unos malos resultados dejen a Barack Obama muy tocado, la maquinaria del Partido Demócrata se ha puesto a trabajar a fondo. Y como cabezas de cartel presenta a la primera dama del país, Michelle Obama, y a la mujer del vicepresidente Joe Biden, Jill.
Michelle Obama ya está manos a la obra en una intensa campaña electoral para ayudar a los demócratas de cara a las elecciones. Y ha recibido el "glamouroso" impulso de la actriz Sarah Jessica Parker, que se ha lanzado junto a ella a la recaudación de fondos.
La popular protagonista de Sexo en Nueva York participó en Nueva York en un exclusivo evento junto a la primera dama y a la esposa del vicepresidente Joe Biden, Jill, informaba la edición digital del diario USA Today.
Al estilo de su personaje en la serie, Parker organizó el lunes una sofisticada velada que comenzó en la casa de la diseñadora Donna Karan, con un selecto grupo de 85 invitados que donaron 10.000 dólares cada uno al Comité Nacional Demócrata (DNC, en inglés).
Después, la actriz y la primera dama se trasladaron al teatro Saint James de Times Square, donde esperaban más de mil simpatizantes demócratas que pagaron entre 100 y 2.500 dólares para presenciar el espectáculo.
En una velada con sabor a Broadway, que contó con las actuaciones de Patti LaBelle y varios actores de musicales, Parker hizo las veces de maestra de ceremonias y no dudó en presentar a Obama como "la mujer que no necesita tacones para mantenerse alta".
La primera dama estadounidense reconoció durante el evento que aún hay que trabajar mucho para que el país salga de la crisis económica, pero subrayó también el mensaje de que su partido "ha llegado demasiado lejos para dar ahora la vuelta", según señalaba el diario.
Los demócratas se enfrentarán el 2 de noviembre a un complicado pulso en las urnas para mantener su hegemonía legislativa, a pesar de que las encuestas apuntan a un significativo avance republicano.
El papel activo de Michelle Obama en ese esquema, con constantes actos de campaña en diferentes estados, la está convirtiendo en una de las mayores esperanzas de los demócratas para darle la vuelta a las predicciones.
Según el diario New York Daily News, la primera dama recaudó alrededor de 1 millón de dólares en sus dos días de viaje a Nueva York.