Puede leerse esta biografía como una vida intensa y casi novelesca a nada que uno se retrotraiga a los orígenes. Esprit Etienne Chalbaud Arnaud era un bordelés que huyó de su país a Bilbao por razones políticas (se posiciona contra los reyes). Su hijo Facundo Chalbaud Cardona se convertiría, con el paso de los años, en uno de los empresarios vascos más importantes del siglo XIX. Fundó en 1862 la fábrica Santa Agueda de Castrejana y en 1872 la Unión Española de Explosivos en Galdakao. Su nieto Pedro Chalbaud Errazquin, protagonista de esta reseña, nació en Bilbao en 1865 para dar comienzo a una vida cargada de gestos y gestas.

Hijo de Facundo Chalbaud y sobrino de Pedro Telesforo de Errazquin (fundadores de La Dinamita de Galdakao, en 1872), conoció desde niño el negocio de explosivos. Casualmente, recién inaugurada la fábrica, comenzó la Tercera Guerra Carlista, y, con ella, su exilio en Baiona, ya que su padre estaba implicado en la causa dinástica. A los dos años de su vuelta, en 1876, falleció su padre, quedando Pedro –Periko para su familia– y sus hermanos al amparo de su tío soltero, en el inmueble y sede social de la firma Viuda de Errazquin e Hijos, en Bilbao.

El joven Periko estudió en el colegio de los Jesuitas de Orduña entre 1875 y 1878. Tras sus estudios de secundaria cursó ingeniería industrial en Barcelona, en cuya Universidad conoció a Sabino Arana, quien logró imbuirle en su pensamiento nacionalista. Recién terminada la carrera de ingeniería industrial en Barcelona fue apoderado general de la Sociedad Española de la Dinamita en España en sustitución de su tío Telesforo Errazquin y en 1893 se casó con Inés Amann Bulfy, nacida en Bilbao 1868, hija del importante comerciante bilbaino Emiliano Amann.

Entre 1889 y 1906, Pedro desarrolló su actividad industrial a caballo entre Galdakao y Bilbao. Bajo su mando, La Dinamita se adentró en el sector de los explosivos militares e implantó instalaciones para obtener ácido sulfúrico. Fue pionero en el Estado. El mismísimo Albert Nobel fue uno de los accionistas de la Sociedad Anónima Española de la Pólvora Dinamita (SED), escriturada en Bilbao en 1872. Periko ba Lanzado. En 1891 participó en el Banco del Comercio en cuyo consejo estuvo desde agosto de 1897 hasta abril de 1901 en que se fusionó con el Banco de Bilbao, del que fue también consejero hasta diciembre de 1913.

En 1929 alcanzó la presidencia de la Unión Española de Explosivos y de todo el grupo. Se sentía imparable. En 1901 fue presidente de la Editorial Vizcaína, editora del diario La Gaceta del Norte. Entre 1908 y 1910 presidió la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Bilbao y, como tal, participó en la directiva de la Junta de Obras del Puerto de Bilbao. En 1907 formó parte de la Agrupación de Sociedades Anónimas del Norte de España, de la que sería vicepresidente. En contacto con su hermano, el jesuita Luis Chalbaud, formó parte del patronato de la Fundación Vizcaína Aguirre, que pondría en marcha en 1916 la Universidad Comercial de Deusto, bajo la dirección científica de los Jesuitas, llegó a ser diputado y senador. Entre 1918 y 1919 ocupó el cargo de senador por Bizkaia, elegido dentro de una candidatura del PNV. En este período, junto a José Horn y Areilza y Anacleto Ortueta, negoció con el conde de Romanones un Estatuto de Autonomía para el País Vasco.

Tras iniciarse la Guerra civil, con más de 70 años, tendría que abandonar Euskadi Sur. El 29 de septiembre de 1936, día de San Miguel, salió en barco desde Mundaka y se refugió en Donibane Lohizune. Las tropas franquistas en Bilbao incautaron todos sus bienes. Regresó a Bilbao en mayo de 1942, donde falleció el 3 de febrero de 1943.